A casi nadie se le escapa que el río Sella/Seya, en su tramo final, concretamente desde Arriondas/Les Arriondes, alberga el conocido como Descenso internacional del Sella, que este año celebra su edición número ochenta y cinco. Lo que no es tan común es que se sepa señalar el lugar de su nacimiento, que como indica el titular, está situado en la más septentrional de las provincias leonesas, concretamente en Fuente del Infierno, en la comarca de Sajambre/Sayambre, a escaso kilómetro y medio del puerto del Pontón y a pie de la N-625 que une Riaño con Les Arriondes. Con motivo de conocer el río desde su nacimiento hasta la desembocadura, y celebrándose la semana que viene la conocida como fiesta de las piraguas, en iLeon nos desplazamos desde Riaño hasta Ribadesella/Ribeseya para conocer íntegramente el río.
A 1.230 metros sobre el nivel del mar se sitúa la Fuente del Infierno, fuente que da origen al río Seya y que desembocará en el mar Cantábrico después de recorrer 66 kilómetros. Descendiendo y atravesando las localidades de Oseja/Oseya y Ribota de Sayambre llegamos al Beyu (palabra propia del asturllionés que se traduce como garganta profunda o encañonamiento de un río). Un desfiladero de más de once kilómetros que merece la pena recorrer lentamente, fijándose en cada puente, en las paredes y escuchando el agua ahí abajo como un murmullo incesante. El río Aguasalio desemboca en el Seya formando una vistosa cascada, en cuyo entorno se puede desfrutar tanto de un restaurante como de unas instalaciones adecuadas para hacer puenting.
Ya con las aguas descendiendo mansas y caudalosas, llegamos a Cangas de Onís, /Cangues, cuyo puente de tres ojos es uno de los más fotografiados de toda Asturias. Y pedal a pedal llegamos a Les Arriondes, donde nos recibe el Seya en el lugar de salida del Descenso Internacional del Sella, es decir, bajo el puente Emilio Llamedo Olivera, quien fuera presidente del Comité Organizador Descenso Internacional del Sella (CODIS) entre 1983 y 2011
El actual presidente del CODIS, Juan Manuel Feliz, quien fuera ganador de la prueba en el año 1968 nos cuenta que el plazo de inscripción se cerró el 25 de julio y que en esta edición participaran 1.200 piragüistas, unas 850 embarcaciones de dieciocho países de los cinco continentes. “Hay que distinguir entre el turístico y el de competición. El turismo creció mucho. A día de hoy están instaladas entre Arriondas, Ribadesella y Cangas unas treinta empresas de turismo activo”, señala Juan Manuel. La competición está en momentos álgidos, indica, que al no celebrarse ni en 2020 ni 2021, en 2022 “sí notamos un aumento del interés. Creemos que este año será un año de récord”. Sobre el número de mujeres que participan en la prueba, calculan que el porcentaje oscila entre un 15-20% del total. Preguntado por el nivel del agua, Juan Manuel informa que “es como el de otros años, además, contamos con la presa del río Dobra, que nos suelta agua para la prueba desde hace ya muchos años. El caudal llaga a aumentar unos treinta centímetros”, aclara.
Sobre las fechas, Feliz indica que la prueba no se disputó entre 1936 y 1943 debido a la Guerra Civil Española y a la postguerra, reanudándose el 11 de agosto de 1944, edición en la que sólo 11 piraguas tomaron la salida. Se puede decir que el Descenso del Sella pasó a tener carácter internacional en el año 1951, cuando por primera vez en su historia contó con competidores extranjeros y es en 1955 cuando se inscribe el primer equipo de otro continente, el equipo de Cuba.
El 1960 se produce un hito en la historia del descenso, ya que en ese año se creó la Federación Española de Piragüismo, separándose definitivamente la Federación Española de Piragüismo de la de Remo, y garantizando el futuro de la Fiesta de las Piraguas.
Para finalizar, Juan Manuel Feliz nos anuncia que este año la pregonera será Lydia Valentín. “Será la primera vez que una leonesa ofrezca el pregón, estamos muy contentos por ello”.
Quizá la persona más recordada sea Dionisio de la Huerta. Dionisio nació en Barcelona, aunque descendía de Coya (L´Infiestu). En 1929 descendió el río Piloña desde Coya hasta L´Infiestu con unos amigos. En 1930 lo descendió desde L´Infietu hasta Ribasella o hasta Sotu Dueñes, según las diferentes versiones. En 1931 se hace sin ningún tipo de dudas hasta Ribadesella y en 1932 se establece el recorrido definitivo entre Les Arriondes y Ribasella. Dionisio de la Huerta fue, junto a sus amigos, también el artífice de la idea del tren fluvial que sigue el recorrido de las piraguas y que se puso en funcionamiento en 1945 entre L´Infiestu y Ribadesella.
Con el alcalde de Ribasella, Paulo García Díaz, conversamos para finalizar este recorrido. Paulo indica que las canoas no tienen mucho impacto en Ribasella, ya que es a la vecina Les Arriondes a donde se regresa una vez realizado el tramo del descenso. El nuevo regidor aclara que “ahora está todo más regulado, no es como en los años noventa, en los que se acampaba en cualquier lado, no había baños públicos, por la carretera iban coches dedos de baja y un largo etcétera”, y enfatiza que “uno de nuestros objetivos es que esta fiesta folclórica vuelva a tener en Ribadesella el reconocimiento y el impacto que se merecen”.
La carretera que une Les Arriondes con Ribasella es un ir y venir constante de coches y furgonetas que transportan las canoas desde el fin del trayecto turístico, en Lloviu, hasta el punto de partida. Ribasella despide las aguas del Seya y las entrega al mar.
De vuelta a Les Arriondes, Víctor Rodríguez, concejal del ayuntamiento de Parres, nos habla del impacto del Seya en su municipio. “La actividad lleva unos cuantos años, pero quizá alcanzó el pico durante la pandemia, 2020-2021. Asturias fue referencia turística por las condiciones sanitarias y el descenso es una actividad al aire libre”, indica Rodríguez, quien añade que “una de las cuestiones positivas es que la gente se queda a cenar, a dormir, y a pasar el fin de semana por la zona”.
El sábado 5 de agosto se oirán de nuevo estos versos en Les Arriondes después del cañonazo de salida. Disfruten si se acercan.
Y ya empezó, la carrera por el agua
Y quien tenga ojos, que mire
Y ponga a mirar el alma
Y diga si no es hermosa
La Fiesta de las Piraguas