Gira teatral amateur que llena de aplausos cada rincón de la provincia de León

Cada verano gracias a los grupos de teatro amateur que recorren la provincia los teatros más modestos se llenan de emoción, comedia y reflexión. Los grupos han estado todo el año ensayando para este momento, así que cargan la escenografía en furgoneta (quien tenga) y se lanzan a la carretera para conquistar, función a función, los corazones de los públicos más agradecidos. El objetivo es claro: hacer del teatro un bien común, accesible y cercano, tan esencial como las fiestas del patrón o la tapina de tortilla del bar de la plaza.

Estos colectivos artísticos no viven del teatro, pero viven para él. Y es esa pasión lo que los mantiene ensayando entre semana, organizando sus calendarios en función de bolos y aprendiendo a hacer de todo: desde actores y actrices, hasta guionistas, técnicos de luces, conductores, diseñadores y montadores. Muchas de estas compañías, además, crean sus propios textos, dotando a sus montajes de un sabor local, auténtico, muchas veces irreverente y siempre valiente. Aunque su presencia no siempre ocupa titulares ni reciben subvenciones, lo que consiguen es una necesidad cultural: llenar espacios con historias que hablan de verdades llenas de humor, emoción o crítica social.

Tilín Telón Teatro Azadinos

Con una trayectoria que ya suma un cuarto de siglo, el grupo Tilín Telón Teatro de Azadinos se ha ganado con creces un lugar destacado en el panorama teatral amateur leonés. Han representado más de 20 obras, involucrado a más de 50 personas de todas las edades, y participado en innumerables eventos culturales y solidarios, como la reciente recaudación de fondos tras la DANA en Valencia o su próximo match de improvisación en apoyo al programa ‘Vacaciones en Paz’.

Siempre generoso y participativo

Su calendario sigue más activo que nunca. En marzo, llevaron su versión de ‘Arsénico por compasión’ al Certamen Nacional de Teatro Amateur de Vitigudino (Salamanca), donde Cristina Sánchez fue premiada como mejor actriz de reparto. “Fue una experiencia muy especial, aunque realmente lo es cada representación”, destaca Marta E. Arconada, una de sus integrantes más activas. Y ya trabajan en una nueva producción que estrenarán en octubre en el Auditorio Café Quijano de Azadinos, con un elenco renovado y ampliado a 18 integrantes.

Su calendario ya empieza este sábado 7 de junio que traerán al claustro de San Isidoro la obra ‘Alfonso IX, el Rey Ciudadano’, un montaje ambicioso y lleno de simbolismo. Pero durante los meses estivales, su obra fetiche es ‘Qué bollo es vivir’, una comedia repleta de juegos de palabras que ya ha cosechado más de 20 representaciones. Este verano la llevarán a Campazas (13 de junio), San Feliz del Torío (9 de agosto), y a Gijón (31 de mayo) en colaboración con la Casa de León. También repetirán con “Arsénico por compasión” en Villaferrueña (2 de agosto) y Canales (10 de agosto). Una agenda complicada teniendo en cuenta las vacaciones de verano. “Bajamos la intensidad de los ensayos, cada miembro sigue haciendo su trabajo individual, y usamos calendarios compartidos para coordinarnos. Los grupos de WhatsApp nos permiten confirmar actuaciones al momento”, explica Marta.

El trato en los pueblos es, según sus palabras, “siempre generoso y participativo”. Cada función deja una huella distinta: niños riendo en primera fila, vecinos que invitan a comer tras la actuación, y escenarios improvisados entre bares, tejados de uralita y partidas de cartas, incluso cuando llueve, como en una ocasión un personaje con fregona improvisó limpiando el suelo como parte del espectáculo. Con experiencias como estas, aunque lleven 25 años de función, dejan claro que el telón no está ni cerca de bajarse.

Actuarte

Uno de estos nuevos grupos que ha venido para quedarse (y recorrer kilómetros) es Actuarte, una joven formación que nació como una evolución del proyecto anterior ‘13 Horas Teatro’, y su núcleo fundacional lo forman tres actrices que decidieron apostar por un nuevo formato, bajo la batuta de la directora y guionista Sara del Río González. “Somos un grupo heterogéneo. Algunos con mucha experiencia y otros que se han estrenado por primera vez”, comenta la directora.

Aunque el proceso creativo ha sido intenso, ha estado lleno de entusiasmo. El grupo ha apostado por una comedia de creación propia, escrita por Sara del Río junto a Nuria V. Martín, que ha sido desarrollada de manera colaborativa. “Es muy enriquecedor ver cómo fluye el guion cuando lo compartimos con el grupo. Lo hacemos nuestro entre todos”, destaca Sara. El resultado: ‘Madre no hay más que muchas’, una obra que retrata los mil rostros de la maternidad contemporánea. Cinco mujeres, cinco formas distintas de ser madre, y una sola consigna: sobrevivir (y si puede ser, con humor). “No hay filtros ni consejos, sólo realidad y carcajadas. Y para quienes temen al llanto de bebé... los hemos cambiado por canciones”, bromea la directora, dejando claro que la obra no deja indiferente a nadie.

Su estreno fue el pasado 9 de mayo en el CEIP La Palomera, con el respaldo de la Asociación de Vecinos La Palomera – San Lorenzo. Las casi 300 personas que llenaron el aforo fueron testigos del nacimiento de una compañía con voz propia. El boca a boca no tardó en hacer efecto, y ya son varios los municipios que han mostrado interés en acoger la función, como Destriana (5 de agosto), Valverde Enrique (15 agosto) o Val de San Lorenzo (2 de septiembre). Además, volverán a León capital el 25 de octubre en el Nuevo Recreo Industrial. Pero el calendario aún cuenta con más fechas disponibles (aunque las vacaciones veraniegas lo compliquen) para todos aquellos que quieran ofrecer a sus vecinos casi 90 minutos de una realidad indiscutible: “es graciosos porque es verdad”.

La Galocha Teatro

Desde los rescoldos de Úvula Teatro nace La Galocha Teatro, un grupo amateur leonés con experiencia a raudales y pasión por todos los costados. Actualmente, está compuesto por 13 actores-socios (que se han formado en la Escuela del Tetaro del Ayuntamiento de León, en AulaT y varios cursos), un técnico y varios colaboradores. Su nombre, humilde como el calzado que lo inspira, refleja perfectamente su filosofía: teatro popular, cercano y adaptable a cualquier rincón de la provincia.

Llevar teatro a los pueblos nos resulta muy satisfactorio

El repertorio que ya van teniendo en su haber es tan variado como los escenarios que pisan: desde monólogos intimistas hasta grandes montajes corales como 'Alagreska', estrenada en mayo en el Recreo Industrial de León. Este verano tienen ya actuaciones en agenda, como la del 11 de julio en San Feliz de Torío, y ofertas aún por concretar. Entre sus propuestas estiales destacan obras como 'Seguridad Social', 'Petición de mano' de Chéjov o el monólogo 'Lapizlazuri'. Su objetivo: una gran obra anual y varias más pequeñas que mantengan activo al grupo todo el año. Adaptarse a cada espacio —incluso a iglesias en uso— es parte del encanto y del desafío. “Llevar teatro a los pueblos nos resulta muy satisfactorio, nos acogen de manera espectacular, mostrándose siempre dispuestos a ayudar, atendiendo a las necesidades que tengamos”, aseguran desde el grupo.

Lo que hacen grupos como Actuarte y tantos otros es algo más que entretenimiento: es una forma de tejer comunidad, de crear identidad, de educar desde el arte. Donde no llega una compañía profesional o una programación institucional, llega una furgoneta (o varios coches) cargada de disfraces, atrezzo y sueños. Cada función en un salón de actos, en un centro cultural o bajo un soportal es un acto de resistencia cultural, una declaración de amor al teatro sin aditivos ni pretensiones, pero con mucha pasión.