El presidente de la Junta, Juan Vicente Herrera, y el portavoz socialista, Óscar López, se emplazaron hoy a trabajar para desarrollar la ley de Ordenación, Servicios y Gobierno del Territorio como un instrumento que contiene mecanismos de solución ante lo planteado por la reforma local del Gobierno. López ofreció un acuerdo para avanzar en el pacto territorial y Herrera dijo que sí.
Después de las diferencias surgidas en el acuerdo Junta, PP y PSOE por la reforma local del Gobierno central y por el plan de reordenación de la atención primaria, López se presentó en el pleno de las Cortes, en su cara a cara con el presidente, en tono conciliador. “Vengo con la mejor de las intenciones para deshacer un nudo”, aseguró.
El portavoz socialista explicó que existen acuerdos “para la galería y acuerdos que tienen que estar en la galería porque son buenos”. En el segundo, enmarcó el pacto de ordenación territorial, que supuso la aprobación de la Ley de Ordenación, la reapertura de las urgencias y un plan de empleo. López afirmó que no rompen nada, porque todo ello se ha cumplido.
Ante la reforma local, que el PSOE va a recurrir y que no renuncia a que las Cortes o la Junta hagan lo mismo, y la reordenación sanitaria, que han marcado distancias y duros cruces de advertencias y recriminaciones entre los dirigentes socialistas y el consejero de la Presidencia, López ofreció que se desarrolle una ley propia de régimen local “para matizar el desastre de la ley de Rajoy”.
En ese punto, tras remarcar que la reordenación recorta servicios, aunque reconoció que no tiene el alcance del cierre de las urgencias nocturnas ya reabiertas-, López espetó al presidente: “Usted tiene que elegir, hacer solo el mapa o por acuerdo”. El socialista ofreció la fórmula: la ley autonómica propia de régimen local y que no haya recortes.
El presidente inició la réplica con un “sí” a lo planteado por el portavoz socialista, aunque pidió que no se le hable de “nudos, corbatas o horcas” y defendió la cultura del acuerdo de su Gobierno tanto en el ámbito político, pese a tener mayoría, como en el social. Herrera hizo suyas las afirmaciones de un socialista -no le citó pero se refería a Pedro José Muñoz- en el sentido de que la ley autonómica de Ordenación tiene las disposiciones para dar una solución a la aplicación de la norma estatal.
En el camino del acuerdo para desarrollar el pacto territorial, sellado en octubre de 2012 y reforzado en junio de 2013, Herrera enumeró la ley autonómica de régimen local, la ley de financiación y participación de los ayuntamientos en los ingresos de la Comunidad, los mapas de unidades básicas y de áreas funcionales y las mancomunidades de interés general y su cartera de servicios.
Para el presidente, son las mancomunidades de interés general las que dan “respuesta” a la norma estatal, pero en su respuesta al socialista remarcó el compromiso de mantener la actividad y las frecuencias en los más de 3.600 consultorios locales. “En el preámbulo y en el final”, ratificó ese compromiso y pidió que se diga un consultorio al que se ha recortado el servicio.
Además, manifestó que los alcaldes se convierten en garantes de ese cumplimiento porque van a denunciar si hay algún tipo de incidencia, como se les ha pedido en la carta remitida desde las gerencias provinciales de sanidad. Herrera insistió en que la reordenación de la atención primaria está en el marco de la gestión de los recursos humanos pero que se mantienen los servicios. El presidente defendió que se busque el equilibrio entre facultativos con sobrecarga de tarjetas sanitarias y otros con menos actividad.
El portavoz socialista sí reconoció que la reordenación no tiene la “gravedad” del cierre de las urgencias nocturnas y que no se cierran consultorios, pero si denunció un recorte en la prestación y en horarios y solicitó que no se vaya en la línea de los recortes.