El fiscal general del Estado, Eduardo Torres-Dulce, ha presentado su renuncia por “motivos personales” y ha comunicado su decisión al ministro de Justicia, Rafael Catalá.
En un comunicado hecho público por la Fiscalía, indica que ahora Torres-Dulce regresará a su plaza de fiscal en el Tribunal Constitucional. Tambén ha comunicado su decisión al presidente del Consejo General del Poder Judicial y del Tribunal Supremo, Carlos Lesmes.
Torres-Dulce ha estado en el centro de la polémica política últimamente por la querella presentada contra el president de la Generalitat, Artur Mas, y otros cargos por la consulta del 9-N que no fue apoyada por los fiscales catalanes aunque finalmente se presentó. Además ha mantenido desde su nombramiento por el Gobierno de Rajoy algunos encontronazos con el PP a cuenta de las acusaciones ejercidas en diversos casos de corrupción que afectan al partido del Gobierno, en particular en Gürtel y los papeles de Bárcenas.