Un total de 9.325 alumnos leoneses se beneficiarán de la convocatoria del programa de gratuidad de libros de texto 'Releo Plus' durante el próximo curso 2017-2018, a los que se destinan casi 2,5 millones de los 14 millones totales para todas las provincias de la autonomía, superando en más de cuatro millones la dotación de la pasada edición.
Se trata de los estudiantes de Primaria y Secundaria que pertenecen a a las familias con una renta inferior a dos veces el Indicador Público de Renta de Efectos Múltiples (IPREM), que cumplían los requisitos exigidos, según un comunicado de la Junta. De los 9.325 beneficiarios, 5.815 corresponden a alumnos de Primaria en sus diferentes cursos y 3.510 más a la ESO.
Asimismo, las familias por encima de este umbral cuyos hijos cursen sus estudios en centros públicos que ya hubieran tenido programas de préstamo de libros, se beneficiarán nuevamente del mismo, hasta agotar las existencias del centro para disponer de libros usados. De esta forma, alrededor de 67.000 escolares, cerca de la tercera parte del alumnado que cursa estudios obligatorios en Castilla y León, se verán beneficiados por 'Releo Plus'.
En lo que se refiere a la resolución de esta convocatoria en toda Castilla y León, se presentaron 104.032 solicitudes, de las que se concedieron 52.338, todas las que cumplían los requisitos exigidos. Así, las principales causas de denegación fueron que las familias superaban el umbral de renta, los alumnos no cursaban los estudios recogidos en la convocatoria, y finalmente, el resto de las solicitudes fueron desistidas o presentadas fuera de plazo. Si el curso que ahora finaliza se concedieron ayudas a las familias con rentas inferiores a 1,5 veces el IPREM, para el siguiente curso, la convocatoria que acaba de resolverse adelanta ese umbral hasta dos veces este indicador.
¿Cómo tendrán que hacerlo los beneficiarios?
Dentro de ese umbral, las familias acudirán en primer lugar a los bancos de libros de cada centro, recibiendo ayudas monetarias para la adquisición de los libros que no hubieran podido conseguir. Una vez adquiridos, tanto estos libros como los prestados, volverán a los bancos de libros de los centros para repetir el proceso en los siguientes cursos, hasta agotar la vida útil de los libros, que la Consejería de Educación tiene establecida en la actualidad en cuatro años, siempre que antes de transcurrir este periodo no se produzca la pérdida o un excesivo deterioro del libro.
Precisamente, una de las grandes novedades del programa de gratuidad de cara al curso 2017-2018 ha sido la creación del Banco de Libros de Texto de Castilla y León, que tendrá titularidad pública, con independencia de estar ubicado físicamente en cada centro de la Comunidad, más allá de su carácter público o concertado.
En el mes de septiembre, las familias deberán recoger los libros del banco de libros del centro, y en caso de faltarles alguno, aportar la factura justificativa del material adquirido antes de proceder al abono de esta cuantía que se realizará, previsiblemente, a finales de año. De este modo, se logrará una visible “agilización procedimental y un gran avance” en el objetivo de la gratuidad de los libros de texto.
Finalmente, tanto familias numerosas, como discapacitados, víctimas de terrorismo o de violencia de género, entre otros colectivos, han sido objeto de una discriminación positiva en las ayudas mediante la aplicación de coeficientes favorables a su concesión.