El Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León (TSJCyL) ha emitido una sentencia en la que desestima los recursos presentados y confirma la condena impuesta por la Audiencia Provincial de León de 11 años de cárcel para dos hermanos por matar a un hombre de un disparo en Villaobispo en el mes de noviembre de 2008. En concreto, se les impuso una pena de 10 años de cárcel a cada uno por un delito de homicidio, a los que se suma un año más por un delito de tenencia ilícita de armas.
Además, los dos condenados deberán indemnizar de manera conjunta a la viuda de la víctima, con 100.000 euros, a sus dos hijos, con 56.864,52 euros para cada uno, y a su madre, con la cantidad de 11.372,08 euros.
Un jurado popular consideró en diciembre de 2021 que FM.M.F. y M.M.F., eran culpables al considerar probado que la muerte de A.R.F. se produjo por un disparo efectuado de forma conjunta por los hermanos, así como que no fue en defensa a un disparo previo.
En la sentencia emitida días más tarde, se consideró probado que la víctima, A.R.F. viajó junto a sus hermanos el día de los hechos, el 8 de noviembre de 2008, desde Cáceres a Villaobispo de las Regueras, “con la intención de arreglar cuentas” con los hermanos acusados, FM.M.F y M.M.F. En el momento que la víctima salió del vehículo, se produjeron varios disparos procedentes de la acera de enfrente, uno de los cuales impactó contra él causándole la muerte en el momento.
Unos disparos que “fueron llevados a cabo, al menos algunos de ellos, de manera conjunta y en unidad de acción y de propósito, por los acusados con intención de acabar con la vida de A.R.F., como efectivamente lograron”, según recogió la sentencia.