Algunos lo hacen por sus hijos, por sus nietos, por la ilusión que se ilumina en los ojos de los más pequeños, que suelen ser quienes más disfrutan de estas fiestas. Otros porque el espíritu de la Navidad les inunda durante estas fechas señaladas, y desean compartirlo y proyectarlo a través de las fachadas y jardines de sus casas.
Así, en contraste con los modestos adornos navideños de la ciudad y del alfoz leonés, algunas viviendas destacan por el llamativo colorido de las luces y las grandes dimensiones de muñecos que proyectan una imagen poco usual en León.
Una de estas viviendas, que parece sacada de una película americana navideña, se encuentra en La Virgen del Camino, y está llena de detalles que evocan la Navidad, como una época feliz y de celebración familiar. El frente de este chalet llama la atención de viandantes y vecinos, puesto que las luces de diversos colores colocadas en las ventanas, barandillas y fachada de la vivienda iluminan un buen tramo de la calle donde está ubicada.
Además, la casa está adornada con muñecos y figuras hinchables de grandes dimensiones de Papá Noel, muñecos de nieve, un Árbol de Navidad, un arco y un globo aerostático; y un trineo con renos luminosos junto a otros objetos acordes con la temática.
A unos pocos kilómetros, en San Andrés del Rabanedo, otro chalet también destaca dentro se su urbanización. No se encuentra tan cargado de fantasía navideña como el primero, pero también brilla al llegar la noche especialmente por los metros y metros de luces que engalanan árboles, balcones, ventanas y su entrada. También cuenta con figuras luminosas de muñecos de nieve, renos, estrellas y Árboles de Navidad.
Está claro que todo el mundo, que así lo desee, tiene derecho a disfrutar de la Navidad a lo grande, con luces, colores y muñecos gigantes en sus hogares, o incluso paseando por la ciudad para admirar algunas terrazas adornadas, escaparates de negocios y puntos adornados que dan un aire navideño más especial a León.