Un leonés, y no un leonés cualquiera sino un activista social muy conocido, Ramiro Pinto, ha conseguido ganar en un litigio judicial a la Junta de Castilla y León a raiz de que a su familia la Gerencia de Servicios Sociales le retirara la posibilidad de renovar su título oficial de familia numerosa de categoría especial a pesar de que uno de los hijos excediera la edad máxima permitida.
El Juzgado de lo Contencioso Administrativo número 3 de Valladolid ha emitido una sentencia el pasado 13 de diciembre en la que el magistrado le otorga completamente la razón y declara no conforme a derecho la negativa de los responsables de la Gerencia de Servicios Sociales de retirarle la categoría especial y obliga a la Junta a reconocérselo con carácter retroactivo a fecha de abril.
La Junta en este caso consideraba ante el juez que las rentas familiares excedían el límite de renta per cápita, entre otros motivos, pero el juez le dio la razón a Pinto, padre de cinco hijos, que en base a una sentencia similar en Andalucía determinaba que el fin de esa condición superior creaba discriminaciones entre hermanos. “Este hecho indiscutiblemente entraña una discriminación de difícil mantenimiento, no hay justificacion legal alguna que justifique esta diferencia de trato, sólo una interpretación interesada de la administración”.
El fallo continúa explicando que, además, se daría una doble discriminación respecto a los casos de categoría especial respecto a la normal de familias numerosas, ya que en estas se mantiene el régimen aunque un hermano mayor abandone el hogar. “La familia numerosa de categoría especial indiscutiblemente ha realizado un esfuerzo económico superior y precisa de una mayor protección para su desarrollo”, remarca el juez.