El consejero de Sanidad, Antonio María Sáez Aguado, supeditó este miércoles la implantación de Radioterapia en el Hospital del Bierzo al documento en el que trabajan oncólogos radioterapeutas para definir la planificación a futuro de la Oncología Radioterápica en Castilla y León. En este sentido, apostilló que se necesitarían al menos dos aceleradores lineales y concentrar un número suficiente de pacientes que garantice los criterios de calidad y seguridad de los tratamientos.
“En poco tiempo dispondremos de un documento consensuado con quienes más entienden, los oncólogos terapeutas, para planificar en el futuro la Oncología Radioterápica”, explicó el consejero, que apostilló que “no hay ninguna decisión tomada” y recordó que en la actualidad se trata de un servicio de planificación autonómica que “requiere la concentración de recursos para que los clínicos tengan suficiente número de casos que garanticen la calidad y la seguridad”.
Así, este tratamiento se puede seguir en los hospitales de León, con dos aceleradores lineales, Burgos con otros dos, y Valladolid y Salamanca, con tres aceleradores cada uno, mientras que, por razones históricas, se mantiene también el servicio en Zamora con sólo un acelerador. En esta línea, Sáez Aguado puntualizó que el informe sobre criterios de planificación aprobado por el Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud hace apenas dos años aconsejaba que las unidades de radioterapia deben disponer al menos de dos aceleradores lineales porque “las discontinuidades en el tratamiento pueden general problemas a los pacientes”.
A ese respecto, puso como ejemplo el caso del Hospital de León, en el que uno de esos aparatos se está renovando en estos días. “Si sólo dispusiera de uno, hubiéramos tenido que suspender tratamientos”, advirtió el responsable autonómico, que aseguró que los pacientes con cáncer del Bierzo que necesitan radioterapia la están recibiendo en condiciones de calidad y seguridad en el Hospital de León.
Mejora de los traslados
Por otro lado, reconoció que el problema existente es que los pacientes tienen que desplazarse para recibir esos tratamientos y se comprometió a mejorar esas condiciones del traslado en cuestiones de comodidad y accesibilidad. A ese respecto, apostilló que garantizar la calidad y seguridad en los tratamientos debe primarse a los inconvenientes que implican los traslados porque “se está hablando de pacientes con cáncer que requieren resultados y eso se llama tasas de superviviencia a los cinco o diez años después de haber padecido la enfermedad”.
“Ese es nuestro principal objetivo y junto a ello la mejora de la comodidad en el traslado y la accesibilidad”, recalcó el consejero de Sanidad. En esta línea, descartó que la utilización o no de camas libres en el Hospital del Bierzo esté vinculada directamente con la actividad quirúrgica y las listas de espera y subrayo que este invierno no se ha suspendido ninguna intervención quirúrgica por falta de camas. “Ese no es el problema, es la falta de tiempo quirúrgico”, puntualizó Saez Aguado, que añadió que en las últimas semanas la ocupación media de camas ha sido del 74 por ciento y avanzó que están trabajando en un plan de eficiencia y reducción de demoras.
En cuanto al nuevo centro de salud de Bembibre, el consejero de Sanidad explicó que el proyecto está pendiente de la adjudicación de la obra. “Se supervisó el proyecto y se licitó”, apuntó Sáez Aguado, que añadió que la previsión es que estas instalaciones estén en “pleno funcionamiento” en el año 2018.