La Federación Española de Boxeo (FeBoxeo) negó este lunes, en declaraciones a EFE de su presidente, Felipe Martínez, que tengan pensado sancionar al boxeador profesional Antonio Barrul, que el pasado miércoles 1 de mayo propinó varios puñetazos a un hombre que estaba increpando a una mujer durante la proyección de una película infantil en una sala de cine de León, el cual fue después detenido por la Policía Local de León y puesto ante el juez bajo la acusación de violencia de género.
“No es cierto que se exponga a una sanción federativa”, asegura Felipe Martínez sobre la posible repercusión del caso. El púgil de 25 años reconoció este lunes que lamentaba la violencia empleada y que le cuesta ver el video de lo sucedido, pero recalcando que no se puede permitir que un hombre maltrate a una mujer porque es algo inaceptable.
Según su relato, cuando había transcurrido algo más de media hora de la proyección de la película escuchó a un hombre que empezó a insultar a la mujer que le acompañaba e incluso pudo ver cómo “la enganchó por el cuello” y empezó “a forcejar” con ella.
“En el momento del forcejeo soltó un golpe que le dio a una niña que estaba al lado de esta pareja y que no tenía nada que ver con ellos”, señaló Barrul, que precisó que “la madre de la menor se puso hecha una fiera y con razón”.
Relató que se acercó para mediar y conminó al hombre a que abandonara la sala y que éste, lejos de deponer su actitud, en todo momento se mostró “muy agresivo” profiriendo todo tipo de insultos, por lo que pidió a los empleados del cine que avisaran a seguridad sin recibir respuesta.
Admitió que ante los insultos que recibía le “hirvió la sangre” y comenzó una pelea entre ambos, si bien subrayó que, consciente de que es un profesional del boxeo, en ningún momento le golpeó en la cara. “Dirigí los golpes hacia el cuerpo y como llevaba un forro polar no creo que le hiciese demasiado daño”, dijo Barrul, que insistió en que su objetivo en todo momento fue el de acabar con la situación que se estaba viviendo.
Reiteró que lamenta haber tenido que recurrir a la violencia, pero aseguró que la situación le “superó” al ver a sus hijos y a su mujer llorando ante lo que estaba sucediendo. Tal y como hizo en la sala de cine tras el incidente, reiteró sus disculpas “a todo el mundo”, aunque afirmó que “a un maltratador hay que frenarlo siempre”.