El que fuera uno de los buques insignia del sector hotelero de la ciudad de León, que cerró sus puertas en el año 2011 por la crisis económica, ha sufrido en el mes de marzo el robo de la práctica totalidad de objetos de valor que quedaban en sus instalaciones como objetos metálicos, puertas, marcos, barandillas, servicios o tuberías y cableado. Lo han desvalijado totalmente, dejando el edificio como un cascarón vacío de complicado reutilización.
El robo, denunciado por la administración concursal ante los juzgados de lo mercantil y la Guardia Civil, debió ocurrir a mediados del mes de marzo, antes de un pequeño incendio sucedido el pasado 25 de marzo, y por el que se detuvo a un joven de 28 años. Practicamente todos los objetos susceptibles de tener valor económico como todos aquellos metálicos o los escasos muebles que quedaban, así como puertas, marcos, tuberías y cableado han sido arrancados y sustraídos de las instalaciones hoteleras. Para poder robar las tuberías se han destrozado incluso buena parte del falso techo de varias plantas del edificio, dejándolo totalmente inservible.
Se sospecha de una banda organizada dado el volumen de lo sustraído y de que se considera necesario el uso de un camión para poder trasladar los objetos más voluminosos como marcos o centenares de metros de tuberías sustraídas. El destino más probable de lo robado puediera ser la chatarra, al hacer especial hincapié en los objetos metálicos que quedaban en el edificio. Se investiga si el detenido por el incendio en el hotel pudiera tener vinculación con el gran robo sufrido por el establecimiento.
Caixbank se ha quedado el hotel bajo dación en pago, cambiándolo por el 100% de las deudas
Hasta hace unos meses, concretamente hasta que hubo fondos disponibles para pagarla, el edificio contaba con seguridad privada que vigilaba las instalaciones de robos y actos vandálicos. En marzo del 2012 se produjo la subasta de la mayor parte de los bienes con los que contaba el hotel, cuya propiedad ha salido varias veces a subasta sin que nadie haya pujado para hacerse con el establecimiento, que también abarca la conocida discoteca Baroke.
El futuro del hotel, una incógnita en manos de Caixabank
El hotel fue construido por un grupo gallego de inversores pasando a ser gestionado en el año 2003 por la empresa burgalesa Los Habares de Hostelería, responsable de otros establecimientos en la provincia castellana. La elevada carga financiera hicieron inviable el hotel con la llegada de la crisis económica y el desplome de la actividad empresarial y se declaró en concurso de acreedores.
Al no poder superarlo se procedió a la subasta del hotel, y sus pertenencias, en diversas ocasiones para liquidar la sociedad. La propiedad finalmente ha caído en manos del banco Caixabank, que se lo ha adjudicado por la deuda que Los Habares de Hostelería mantenía con la antigua CajaBurgos, luego integrada en Banca Cívica y ahora en manos de Caixabank. El banco catalán se ha quedado el hotel bajo el sistema de dación en pago, esto es, con la propiedad condona el 100% de la deuda que la sociedad mantenía con la entidad financiera.
Ahora la incógnita es que hará con la propiedad la entidad catalana dado el estado en que ha quedado el edificio tras el desvalijamiento total. Fuentes del sector hotelero cifran en varios millones de euros los necesarios para la rehabilitación del edificio para su uso original, un aspecto que ponen en duda que pueda ocurrir a medio plazo dada la actual situación económica y del sector en particular. Un destino probable podría ser su traspaso al “banco malo” o Sareb, dentro del paquete que los bancos no intervenidos podrán realizar para “limpiar” sus balances de activos inmobiliarios tóxicos, categoría en la que podría incluirse el Hotel Cortes de León dado el estado en que ha quedado.
¿Podrá volver a su antiguo esplendor el hotel de la carretera Asturias? ¿O veremos su lento deterioro o incluso su demolición? En manos de Caixabank está ahora su futuro.