La remodelación de la estación de autobuses de León ha traído consigo muchas críticas de partidos, sindicatos y, ahora, de Conceyu País Llionés que convoca una manifestación en protesta por el resultado de estas obras durante el sábado 13 de enero.
Conceyu califica de “decepcionante” el resultado de esta remodelación criticando por un lado las decisiones arquitectónicas que hacen que parezca más grande y la repetición de “logos gigantes de la Junta de Castilla y León en todas las grandes cristaleras”.
Esto último ya fue denotado por UPL, que lleva a las Cortes de la Junta el “excesivo número de logotipos” que, afirman, “parece buscar más bien un efecto adoctrinador sobre los leoneses”.
La nueva estación de autobuses de León abrió al público el día 15 de diciembre por un presupuesto final de menos de 7 millones de euros de los 8 millones proyectados y bautizada (al menos de forma oficial, ya que su nombre no es visible en la estructura) como 'Reina Urraca I de León'. Un presupuesto que se se completa hasta un total de 15 millones de euros por el coste de su gestión durante los próximos 20 años, es decir, hasta 2043, por parte de la empresa pública de la propia Junta Somacyl.
“La pretendida unión intermodal con la vecina estación de trenes, tras la rebaja presupuestaria, se queda en un anuncio de recorrido por la acera de la calle bajo palio protector del sol y la lluvia”, critica Conceyu en alusión al proyecto que vincula las estaciones de autobús y trenes.
Conceyu critica la presencia de grandes logos de la Junta, que cifran de 12, en oposición a la falta de presencia del nombre adjudicado a la estación: “Es vergonzoso que la Junta aproveche esta remodelación para convertirla en un panel continuo de propaganda, donde inserta, machaconamente, el logo de la Junta, (...) con el ánimo de recordarnos a los ciudadanos leoneses (de capital y provincia) quién manda. (...) Es una provocación manifiesta a los leoneses que no podemos, no debemos, soportar”.
Comparan el proyecto con el de la estación de autobuses de Valladolid que, dicen que proyecta en 30 millones, que integra un espacio intermodal “con soterramiento de vías incluido” en un conjunto total que asciende a los “100 millones de euros de presupuesto”. “Queda bien notorio cual es la ciudad privilegiada, la metrópoli, y cual la dominada, hecho que, encima, nos restriegan a cada paso, con tanto logo serigrafiado”.
La protesta tiene lugar el sábado 13 de enero a las 12.30 horas ante la propia estación de autobuses.