Las prestaciones de los autónomos jubilados dan para poco y aproximan al umbral de la pobreza a aquellos que no cuentan con un patrimonio acumulado que complemente su pensión. Y es que un pensionista procedente del régimen de autónomos cobra de media en Castilla y León 691,83 euros mensuales, 565,47 menos que otro del general.
Esta cifra, en 14 pagas, supone unos ingresos de la Seguridad Social de 9.685 euros para estas personas, que representa una cifra que está sólo por encima del umbral de la pobreza relativa (8.209 euros, según la Encuesta de condiciones de vida del INE), en 1.476 euros. Asimismo, esos ingresos mensuales están muy alejados del Salario Mínimo Interprofesional (735,9 euros).
Los datos que facilita la Seguridad Social constatan que la diferencie entre la percepción de un jubilado autónomo respecto a uno del régimen general es mayor en la provincia de Burgos, donde alcanza los 705,93 euros (698,26 frente a 1.404,19); y la menor se registra en la abulense, donde se sitúa en 351,32 euros (700,47 frente a 1.051,79.
Por encima de la diferencia media en la Comunidad también se encuentra Valladolid, donde los que cotizaron por cuenta propia perciben 671,35 euros menos que los asalariados del general (740,72 frente a 1.412,07).
Ya por debajo de la media aunque muy próximos se encuentran los jubilados autónomos de Palencia, con una diferencia de 564,77 euros (1.276,26 frente a 711,49); los de León, con una horquilla de 526,14 euros (1.179,06 frente a 652,912); y los de Segovia, con una distancia de 506,13 euros (713,17 frente a 1.219,3).
Por lo que se refiere a la provincia de Soria, la percepción media de un jubilado del régimen general está en los 1.179,15 euros frente a los 713,16 de los autónomos, es decir, 465,99 euros de distancia entre ambos colectivos. En cuanto a Salamanca, la distancia se sitúa en los 441,74 euros (705,73 frente a 1.147,47); y en Zamora, en 397,73 (670,86 frente a 1.068,59).
Un análisis por sexos reflejan una gran diferencia en las percepciones a favor de los hombres. En el caso de los varones, cobran de media como pensionistas del régimen general 1.345,25 euros, frente a los 756,69 de los autónomos, con una diferencia de 588,56 euros. En cuanto a las mujeres, sus percepciones medias en el régimen general ascienden a 1.009,13 euros, y en el de autónomos a 584,59, es decir, 424,54 menos.
Vida digna y fiscalidad
La presidenta de ATA Castilla y León, Soraya Mayo, defendió que “de forma clara, es preciso reformar el régimen de autónomos, que ha sido siempre una gran asignatura pendiente” a pesar de los avances conseguidos durante los últimos años; y apeló que puedan aportar en base a su propio volumen de negocio.
Mayo recalcó que “indudablemente con una pensión de esta cuantía media es imposible llevar a cabo una vida digna y el objetivo siempre debe ser ese”. La responsable de ATA en la Comunidad recordó que “el alma del estado del bienestar es que las personas cuando han agotado su vida laboral reciban de forma justa una cantidad para vivir con dignidad”.
Mayo abogó porque se abra un debate para reformar el sistema de pensiones, que es el “alma” del estado del bienestar y está “dañado seriamente”. Soraya Mayo constató que queda “un gran camino por recorrer” y advirtió de que en la base de todo debe estar la fiscalidad, porque “no se puede repartir cuando no se puede recaudar”.
En este sentido, constató que con la globalización la riqueza sale de los países y se concentra ahora en los centros financieros, donde hay que ir a buscarla. Los estados se empequeñecen, dijo, porque “recaudan donde no se genera riqueza y donde se genera no lo hacen, lo que se traduce en políticas pequeñas y vulnerables”.
Cotizar según ingresos
La Federación de Autónomos de Castilla y León (CEAT Castilla y León) mostró su “preocupación” por el sistema de prestaciones públicas de la Seguridad Social que “atañe muy especialmente a su colectivo”. En este sentido, recalcó a Ical, que la diferencia entre lo que percibe u pensionista del régimen general en relación a la prestación de un trabajador por cuenta propia, “es una prueba más de la necesidad de reformas legales que no únicamente fomenten la actividad de los autónomos sino que, de alguna u otra forma, les garantice su futuro personal y familiar una vez finalizada su actividad profesional”.
CEAT Castilla y León considera “clave” que los autónomos coticen por sus ingresos reales así como que se amplíen los tramos en la base de cotización para que este régimen se asemeje al general de los trabajadores. “El Pacto de Toledo seguirá el consenso que se proponga en la subcomisión del Congreso que está tratando la reforma del RETA y que mayoritariamente pide que los autónomos coticen más, ya que el 75 por ciento de este colectivo lo hace por la base mínima”, indicaron desde la organización.
Finalmente, CEAT considera importante que la Seguridad Social facilitase más información sobre las jubilaciones que tendrán los autónomos con sus cotizaciones y ofrecerles más oportunidades de elección.