La autopista León-Asturias es la única que pierde usuarios y la de Astorga sigue registrando el menor tráfico

Agencia ICAL

5 de octubre de 2025 12:24 h

Las autopistas de peaje de Castilla y León registraron en el último año un crecimiento del tráfico de algo más del 2%, una cifra muy por debajo del incremento del 5,2% de la media estatal. En este contexto, destacan de manera especial las dos autopistas que atraviesan la provincia de León, la AP-66 (León-Asturias) y la AP-71 (León-Astorga), con realidades muy distintas tanto en tráfico como en tarifas. Hay que recordar que sólo las provincias de León, Segovia y Ávila sufren aún la presencia de peajes para circular, en el caso de León, dos de las más caras de España.

La AP-71, que conecta León con Astorga, fue la que más creció de toda la Comunidad, con un aumento del 6% en su intensidad media diaria. Aun así, continúa siendo la autopista con menor volumen de tráfico de Castilla y León, con apenas 5.631 vehículos de media, en parte por ser una de las más caras de España por kilómetro.

En el caso de los peajes, su coste varía entre seis y quince céntimos por kilómetro (entre 2,40 y 6 euros), dependiendo de la hora del día, con una diferencia notable para quienes circulan de madrugada, que pagan hasta tres veces menos que en horario diurno, según datos del Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible a los que ha tenido acceso Ical.

Por su parte, la León-Asturias AP-66, que une La Virgen del Camino con Campomanes, llamada del Huerna, experimentó un retroceso del 2,9% en su tráfico, hasta quedarse en una media diaria de 8.597 vehículos. La reducción se explica en gran medida por el desprendimiento ocurrido el pasado 10 de noviembre, que obligó a cortar la vía durante 17 días, y que desde que se reabrió continúa con un único carril en uno de los sentidos.

Aún así, es una de las autopistas más caras: recorrer sus 77,7 kilómetros supone abonar 15,60 euros, lo que equivale a 0,22 euros por kilómetro, incluso un céntimo más que en la AP-6 (Adanero-Villalba). Así lo revela un informe elaborado por la organización de defensa de los conductores Automovilistas Europeos Asociados (AEA), en el que se ponen de manifiesto diferencias tarifarias de hasta un 830%.

En lo que respecta al tráfico pesado, la AP-66 ocupa el segundo puesto de la Comunidad con una media de 1.307 camiones al día, solo por detrás de la AP-6. Este dato refleja su papel como corredor clave para la conexión con Asturias y el transporte de mercancías a través de la Cordillera Cantábrica.

En el conjunto autonómico, la AP-6 (Adanero-Villalba) se consolida como la autopista con mayor tráfico de Castilla y León, y una de las más transitadas del país, con 30.568 vehículos diarios tras un incremento del 1,3%. Además, concentra también el mayor flujo de camiones, con una media de 4.012 al día.

Le siguen las autopistas que vertebran Segovia y Ávila: la AP-61 (Segovia-San Rafael), que creció un 6,7% hasta los 8.831 vehículos, y la AP-51 (Ávila-Villacastín), que alcanzó los 8.720 tras una subida del 2,8%. Esta última, sin embargo, es la que menos tráfico pesado soporta, con 638 camiones diarios de media.