Apuesta clara por la fusión

Milena Pasetti

En los próximos diez días, todos los esfuerzos de Caja España-Duero para despejar su futuro estarán puestos en buscar socio para una nueva fusión. Esa es la opción calificada como “más favorable” en el seno de la entidad, frente a la segunda posibilidad que implicaría solicitar una ayuda al FROB y quedar a las puertas de una bancarización.

El alcalde de León y también consejero, Francisco Fernández, también mostró este viernes su predilección por esta opción, al asegurar que cree que “hay que buscar la fusión para ser más solventes”. Al mismo tiempo, abogó por lanzar un mensaje de tranquilidad a empleados y clientes de la Caja. “No hay ninguna amenaza para nadie por estos condicionantes”, afirmó.

Actualmente, el core capital que acumula la entidad llega al 8.2%, algo por debajo de las nuevas exigencias del Banco de España (10%). Eso se traduce en un faltante de capital cercano a los 500 millones de euros.

Fernández evitó revelar más detalles sobre la ronda de contactos que Caja España-Duero ha iniciado con otras entidades con vistas a una posible fusión, indicando que “se está hablando con todas las cajas por esta situación”. En principio, las negociaciones estarían centradas en concretar con Unicaja o Ibercaja una estrategia común.