Concentración en El Burgo Ranero contra una macrogranja porcina que se encamina hacia su construcción

Imagen de archivo de una explotación de ganado porcino.

Redacción ILEÓN

'Stop ganadería industrial'. El proyecto en marcha de una macrogranja en el municipio leonés de El Burgo Ranero, con previsión de albergar más de 3.100 ejemplares de ganado porcino, está movilizando a colectivos y personas que critican la implantación de este tipo de granjas animales por el impacto que pueden generar. Un movimiento crítico que no es nuevo en la zona., ya que son varios los intentos de este tipo de instalaciones en los últimos años.

En concreto, el sábado 28 de diciembre, a las 12.00 horas, se ha convocado una protesta frente a la Casa Consistorial para expresar su oposición al proyecto de esta explotación de cerdos, que se radicaría en una parcela entre Villamuñío y Villamarco, sobre una finca de 148.141 metros cuadrados.

Con esta concentración se quiere manifestar la preocupación de la comunidad por las posibles consecuencias ambientales y sociales que esta explotación podría acarrear, como la contaminación de acuíferos, la emisión de gases y olores, y la degradación del paisaje, remarcan desde la organización. Además, temen que la actividad de la granja pueda afectar negativamente a la calidad de vida de los habitantes de la zona.

El Ayuntamiento de El Burgo Ranero, que afirma que carece de competencias sobre el proyecto, se ha mostrado contrario al mismo, situándose al lado de los vecinos en su amplia oposición. La concentración del próximo 28 de diciembre servirá como muestra de unidad y como un llamamiento a las autoridades competentes para que reconsideren la autorización de esta iniciativa, que está en espera de una declaración ambiental positiva, que en este caso depende de la Junta de Castilla y León.

De forma paralela a la declaración ambiental, Confederación Hidrográfica del Duero (CHD) somete desde la semana pasada a información pública la solicitud de concesión del aprovechamiento de aguas subterráneas que requerirá la granja, con un amplio consumo de este elemento, otro motivo por el que se ha considerado impulsar la movilización vecinal.

Según consta en la publicación de CHD, se trata de un sondeo de 100 metros de profundidad, 500 milímetros de diámetro, 300 de diámetro entubado y un caudal máximo instantáneo de 2,83 litros por segundo. El volumen máximo solicitado es de 29.762 metros cúbicos. Las aguas corresponden a la masa subterránea Terciario Detrítico del Esla-Cea.

Datos del proyecto

En cuanto al proyecto, se trata de una explotación porcina de 2.650 cerdas con lechones hasta de 20 kilogramos, a las que hay que sumar 500 cerdas de reposición y seis verracos. Según consta en el proyecto básico, las instalaciones constarían de una zona de oficinas-vestuarios, almacén, nave de destete, nave de partos, nave de gestación confirmada y nave de control para la gestación, cuartos auxiliares, cuarto de inversores, cuarto de instalaciones, pasillos de comunicación y muelles de carga y dos balsas de almacenamiento de purines cubiertas de algo más de 7.000 metros cúbicos cada una.

En el informe se prevé una producción anual de purines en la explotación de 17.444 metros cúbicos. También está previsto un sondeo para suministro de agua, instalación fotovoltaica, dos depósitos de agua y 12 silos de pienso.

Se trata del segundo intento de los promotores, una compañía con sede en Madrid, la empresa Danakyl Studios y Proyectos SL, pero vinculada a la provincia de Palencia. Ya hace tres años que hubo un doble intento similar en pueblos del mismo Ayuntamiento y que no prosperó, entre otras cosas por la oposición del Consistorio y las críticas de una plataforma de vecinos creada ante la preocupación de las elevadas cifras de concentración de animales de la iniciativa.

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