Una trifulca por una chopera obliga al Ayuntamiento de Las Omañas a regular la distancia entre árboles y fincas

El municipio de Las Omañas ha creado una ordenanza que regula la distancia entre árboles del casco urbano que ha nacido a raíz de una disputa entre dos vecinos a causa de unos chopos que se habían plantado cerca de una vivienda.

El problema, según comentan habitantes del municipio, surge por la plantación de chopos cerca de caminos del municipio, concretamente en un caso de la localidad de Santiago del Molinillo, que podrían dar problemas una vez las plantas se desarrollasen. La nueva ordenanza del municipio trata de evitar nuevas situaciones similares, y dispone de unas distancias mínimas que las plantaciones en fincas rústicas y, especialmente, urbanas se deben respetar.

La ordenanza, publicada en el Boletín Oficial de la Provincia (BOP) el martes 20 de febrero y que ya ha entrado en vigor, regula que todas las plantaciones se deben realizar respetando una distancia mínima entre fincas rústicas y urbanas de distinto titular de 25 metros para árboles altos (de una altura de más de 20 metros en un estado de madurez) y de 5 para árboles pequeños (de menos de 20 metros de altura una vez hayan crecido). En el caso de las fincas rústicas de distinto titular la distancia mínima será de 5 metros independientemente de la altura del árbol.

De no cumplirse estos requisitos el Ayuntamiento ordenará el arranque de toda plantación de menos de seis meses en 15 días y a costa del infractor, quien responderá de los daños y prejuicios que puedan haber causado sus árboles a los vecinos.