Los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado tratan de localizar a V.M.D.S., un ponferradino de 29 años acusado de matar en octubre de 2013 a la hija de su pareja, de cuatro años. El Ministerio Fiscal pide 18 años de cárcel por homicidio.
Además, el ponferradino –imputado por homicidio- ya se había ausentado otra vez más en su obligación de firmar regularmente en los juzgados. La Sección Primera de la Audiencia de Vizcaya suspendió el juicio, que estaba fijado para el pasado viernes, 16 de enero.
V.M.D.S. tenía que declarar este lunes ante el jurado popular, junto con la madre de la niña y el padre biológico, y a lo largo de la semana prestarían declaración los agentes de policía implicados en el caso y los forenses que realizaron la autopsia a la pequeña.
En el supuesto de que este ponferradino fuera detenido y puesto a disposición judicial antes de los siguientes 30 días, se mantendría el juicio con los mismos miembros del jurado popular.
El fatídico día en que la menor fue asesinada, la madre se encontraba trabajando y su actual pareja era quien se encargaba del cuidado de la niña. Tras lo sucedido, V.M.D.S. declaró que tras recoger a la niña del colegio, subieron a la vivienda en la que los tres residían y la menor se cayó por las escaleras, quedando inconsciente y afirmando que la subió al domicilio para reanimarla. Una declaración que contradijo el resultado de la autopsia, que reveló que la niña murió a causa de una agresión, puesto que los golpes y marcas en la mandíbula que presentaba no se correspondían con la supuesta caída que dijo sufrir el acusado.
Según hace público el diario El Correo, el escrito del Ministerio Fiscal puso de relieve que fueron dos golpes en la cabeza los que acabaron con la vida de la niña, que además, presentaba marcas que se correspondían con el dibujo de las paredes de la casa.
Tras las contradicciones de las declaraciones del joven ponferradino, la jueza instructora del Juzgado número dos de Barakaldo le imputó por homicidio, aunque quedó en libertad con la obligación de presentarse en los juzgados periódicamente. Tras la última ausencia de V.M.D.S., ahora se encuentra en paradero desconocido y en busca y captura por las fuerzas de seguridad.