El Ministerio de Cultura estudia cómo corregir su polémica restauración en la Muralla de Ciudad Rodrigo

J.M.A. / Agencia ICAL

El Ministerio de Cultura y Deporte del Gobierno de España estudia aplicar una pátina para mitigar el tono del mortero dispuesto en la intervención de la Muralla de Ciudad Rodrigo, en la provincia de Salamanca. Los trabajos de rehabilitación, recientemente terminados, que se han realizado sobre la garita de la Puerta de la Colada no han dejado indiferente a nadie debido al contraste con el resto del conjunto histórico arquitectónico que conforma la fortaleza mirobrigense.

Sin embargo, según confirmaron a Ical fuentes ministeriales, el resultado final de la obra podría no ser el que luce actualmente y que tanto malestar ha generado entre la ciudadanía. De este modo, anunciaron que habrá una última visita a la obra en la que estarán presentes, “como ha sido habitual en todo el proceso”, la dirección facultativa del proyecto, así como los arquitectos municipales y los de la Junta de Castilla y León, quienes revisarán la conveniencia de aplicar esta pátina para mitigar el tono del mortero dispuesto en la intervención.

Y es que, según destacaron las mismas fuentes, los trabajos realizados en la Puerta de la Colada de la Muralla de Ciudad Rodrigo por el Ministerio de Cultura y Deporte, a través del del Instituto de Patrimonio Cultural de España, se ha llevado a cabo “en todo momento” en coordinación con la Junta de Castilla y León y el Ayuntamiento mirobrigense, que han realizado un “seguimiento continuo” de los mismos.

El Ministerio apuntó, de hecho, que la garita “ha estado históricamente revestida”, lo que justifica la aplicación de mortero, que ya se preveía en el proyecto licitado. “Esta actuación fue confirmada al comprobar in situ que no se podía recuperar el mortero existente”, añadieron. En todo caso, Cultura insistió en que la restauración se ha llevado a cabo siguiendo los criterios profesionales de “mínima intervención necesaria, reversibilidad, compatibilidad y estabilidad”, así como de “diferenciación respecto a las técnicas y materiales originales”.

Cabe recordar que se trata de una actuación proyectada en 2017 y que acumulaba, por tanto, un retraso de varios ejercicios. No pudo iniciarse la tramitación hasta contar con el respaldo de la Comisión Territorial de Patrimonio de la Junta, que instó a redactar de nuevo el proyecto inicial, que estaba licitado en algo más de 413.00 euros, aunque finalmente ha sido ejecutado en unos 360.000.

El alcalde de Ciudad Rodrigo, Marcos Iglesias Caridad, ya se desmarcó del resultado de estas obras recordando a través de sus perfiles en redes sociales que la obra es competencia del Gobierno central y que el Ayuntamiento “nada tiene que ver con la ejecución”, más allá de pedir que se supervise a través de Patrimonio. En el mismo comunicado, criticó el mortero “tan blanco” que se había aplicado y calificó “de despropósito” el resultado de la obra en la garita.