El libro ‘Los fogones del Curueño’ rescata la cocina tradicional leonesa en 89 recetas

V. Silván/ Ical

La iglesia de La Cándana, en el municipio leonés de La Vecilla, acogió hoy la presentación del libro 'Los fogones del Curueño', que recoge la cocina tradicional leonesa en sus 167 páginas y 89 recetas. Su autora Mónica Robles, ante la posibilidad de perder el recetario de su madre –que a su vez había heredado de su abuela-, decidió recuperar y recopilar todas esas recetas de “las madres y las abuelas del pueblo”.

Robles ha descifrado recetas manuscritas en viejos cuadernos, “de los de dos renglones de antes”, con palabras ilegibles por las manchas dejadas en las horas y horas pasadas en la cocina e instrucciones que expresan medidas en “cuarterones, onzas y libras”. “Están muy sobados, lo veo por mi madre, que tiene el de mi abuela y no lo pasa a limpio, siempre tiene el mismo recetario y ya no se lee en él”, se quejó.

Otras recetas, que ya se habían perdido y no estaban en los recetarios, las ha recuperado gracias a las conversaciones con los vecinos de La Cándana. Es el caso de los bollos de azúcar, una de las recetas “más características” del valle del Curueño, “pero que casi nadie tenía”. “Son unos bollitos que se hacían antiguamente cuando se hacía el pan en el horno pero que se fue perdiendo, aunque incluso yo me acuerdo de comer alguno de pequeña”, confiesa.

Así, en La Cándana ya han vuelto a comerse este dulce gracias al recuerdo de una de sus vecinas, Amor Lanza, que explicó a Mónica la forma de hacer estos bollitos con manteca de cerdo –que ha sustituido por aceite-, azúcar, harina y una “copita” de orujo. “Son especiales de aquí, no como los frisuelos que se hacen prácticamente en todo León, y se llaman así porque se deshacen como si fueran granitos de arena cuando los comes”, explica.

Otro de los platos que le ha sorprendido encontrar es el llamado 'postre americano'. Estaba en el recetario de su abuela y no le hizo caso hasta que un día en la televisión escuchó a alguien comentar que era una receta muy típica de la zona de montaña de los Argüellos. “Mi abuela murió en 1950, por lo que es una receta antigua y creemos que la habrán traído los indianos que en su día marcharon a Cuba y regresaron”, apunta Mónica Robles.

Y así hasta completar 77 recetas tradicionales para hacer lentejas, cocido, cordero, pichones, truchas o bacalao y a las que hay que sumar otras 12 contemporáneas, que incluyen desde un salmorejo con cecina o un 'brioche' de morcilla hasta platos llegados incluso desde el otro lado del Atlántico, concretamente Argentina, como es el caso de unos salmones a la parrilla.

Las recetas se acompañan de anécdotas de la infancia de la propia autora, como en la cita donde recuerda: “Cuando cogíamos las patatas de los prados y directamente las asábamos en una hoguera”, u otras vividas por personas mayores del pueblo que guardan relación con los platos o con alguno de sus ingredientes. De este modo, también pretende recoger las costumbres y tradiciones de esta zona de la provincia, como los juegos de los bolos, los corros de aluche, la pluma de gallo que se utiliza para pescar o la leyenda de la dama del Arintero.

La Asociación Cultural de La Cándana del Curueño es la encargada de la edición de este libro, con una tirada inicial de 250 ejemplares, que pueden adquirirse en el pueblo o a través de correo electrónico (info@lacandana.es). También cuenta con la colaboración del cocinero Juanjo Pérez, del restaurante Cocinandos de León -con una estrella Michelin-, que ha escrito el artículo que ilustra la contraportada del libro.

En la presentación de la publicación participaron el periodista y escritor Pedro García Trapiello, la fundadora del restaurante La Praillona de Boñar, María Antonia González González, así como otras autoridades municipales y provinciales, como es el caso de la alcaldesa de La Vecilla, Manuela García, y el diputado provincial de Cultura, Marcos Martínez.