La Federación de Industria, Construcción y Agro de UGT (UGT FICA) en León ha mostrado su rechazo al preacuerdo alcanzado en la mesa de negociación sobre el futuro de Azucarera y denuncia que las decisiones que afectan al empleo en la provincia se están tomando fuera del territorio. El sindicato critica que no se ha defendido de forma contundente la continuidad de la planta de La Bañeza y exige que la votación del preacuerdo se realice en cada centro de forma proporcional al número de trabajadores afectados.
Según UGT FICA León, el cierre de la planta supone un nuevo paso en el proceso de desmantelamiento industrial y agrícola del territorio leonés, agravando la pérdida de tejido productivo y obligando a la población en edad laboral a abandonar la comarca. “La situación recuerda a lo vivido en las cuencas mineras, donde las ayudas y prejubilaciones no frenaron ni la despoblación ni la decadencia económica”, afirman desde el sindicato.
Aunque el preacuerdo ofrece salidas voluntarias para algunos trabajadores, UGT insiste en que no aborda el problema de fondo. La representación sindical de La Bañeza no ha firmado el documento y esperará a una asamblea con los trabajadores del centro para tomar una decisión definitiva.
UGT FICA también denuncia que la empresa ha querido maquillar el cierre, asegurando que se mantendrán algunos puestos, cuando en realidad —según el sindicato— se trata de un cierre total con graves consecuencias para la comarca. Critican, además, que la empresa haya evitado negociar directamente con los afectados en León, trasladando las decisiones fuera del ámbito local.
Desde la organización sindical lamentan que las gestiones realizadas por distintas administraciones públicas para frenar el Expediente de Regulación de Empleo (ERE) no hayan dado resultados y reclaman que se activen de inmediato alternativas industriales viables para el territorio. En ese sentido, recuerdan que la Fundación Anclaje está operativa, pero que la empresa aún no se ha implicado plenamente en su funcionamiento.
UGT FICA León concluye su comunicado con una advertencia: “Esto es lo que ocurre cuando las decisiones se toman lejos del lugar donde realmente impactan; se firman acuerdos aparentemente positivos pero profundamente lesivos para quienes sufren sus consecuencias directas”.