Comisiones Obreras (CCOO) de Industria de León ha defendido este lunes el proceso de votación del preacuerdo alcanzado en la mesa de negociación respecto al cierre de la planta de Azucarera en La Bañeza. Una votación que UGT de León calificó de “irregular”. CCOO de Industria de León ha calificado de bulos las acusaciones del otro sindicato, y ha defendido las condiciones de este preacuerdo que se hará efectivo el próximo jueves. En la votación, a la que asistieron la mitad de los trabajadores de la planta leonesa, un 63% votaron a favor de estos despidos preacordados (con una media de respaldo del 75% en el conjunto de plantas afectadas).
El secretario de Industria de Comisiones Obreras en Castilla y León, Miguel Ángel Breznes, ha detallado que en un inicio la empresa planteaba 251 despidos que finalmente, después del principio de acuerdo firmado por 12 integrantes de las tres organizaciones sindicales (USO, CCOO y UGT) han supuesto más de 150. Los representantes de CCOO han asegurado que “el único que no lo firmó” fue el presidente del comité de empresa de La Bañeza, Benigno Pérez, también de UGT, quien “dice que CCOO no ha apoyado en ningún momento la lucha contra el cierre de la planta leonesa y que lo único que ha hecho es negociar un ERE”, algo “totalmente falso”.
Entre las condiciones acordadas, Breznes ha destacado la posibilidad de que los mayores de 58 años perciban tres anualidades completas, dos para más de 60 años y una para a partir de 62 años, prejubilaciones y traslados incentivados.
La “parte amarga” de los resultados de las negociaciones, según la ha calificado el secretario de Industria autonómico de CCOO, ha sido la imposibilidad de evitar el cierre práctico de las instalaciones de Azucarera en La Bañeza ya que, aunque la empresa nunca ha hablado del cierre sino de la permanencia de una veintena de trabajadores, el traslado de la molturación a la planta de Toro supone la estocada definitiva para el futuro de la planta leonesa.
Acusaciones cruzadas
Frente a las acusaciones efectuadas por parte de la Unión General de los Trabajadores, Brezmes consideró que “hay cerrar el capítulo” porque “nadie entendería que los sindicatos se estuvieran enfrentando de forma permanente”, de manera que “si a alguien se le han olvidado para qué está aquí, tendrá que rendir cuentas a la gente a la que representa”, ya que “la decisión la ha tomado Azucarera y a partir de ahí se ha trabajado para evitar el cierre y conseguir las mejores condiciones”.
UGT ha denunciado que “la asamblea y votación realizada en La Bañeza no cumple con la normativa y cuenta con graves irregularidades”, de las que ha responsabilizado Comité Intercentros de Azucarera, responsable de la negociación y con mayoría de CCOO. UGT también criticaba que la votación había sido “precipitada” al considerar que no ha habido “margen para que los trabajadores pudieran acudir y pensar” por lo que ha habido una gran abstención, a lo que ha sumado que “no existe censo oficial de los trabajadores” y que en la lista presentada para votar “incluso se han inscrito a los trabajadores a bolígrafo”.
El secretario general de CCOO Industria en León, José Javier Freire, ha descartado estas afirmaciones asegurando que: “el día antes de la asamblea se avisó a la totalidad de la empresa nada más haber alcanzado el preacuerdo”. A su vez, señaló la posibilidad de “movimientos tramposos por la otra parte” que “celebró una asamblea antes y que intentó convencer a la gente de que era precipitada y tenía que hacerse el lunes” cuando “retrasar la votación no era entendible”.
También se quejó UGT de que la votación se hizo mediante una caja, a pesar de que “no hay nada escrito que diga cómo se tiene que votar en una asamblea”, ya que “en algunas ocasiones se ha hecho hasta a mano alzada”.
Ante la denuncia del sindicato en la Inspección de Trabajo por la asamblea, Freire insistió en que la votación se hizo “totalmente legal”, con la asistencia de unos 80 trabajadores de los 140 afectados. “Si alguien se quiere enredar en procedimientos lagos, costoso y que van a crear intranquilidad, cada uno sabrá, pero la impugnación es algo con muy pocas probabilidades de salir adelante, porque se ha sido cuidadoso y escrupuloso con las formas”, concluyó.
La consejera de Industria pide unión sindical
La consejera de Industria, Comercio y Empleo de la Junta de Castilla y León, Leticia García, reiteró este lunes en Palencia la postura del Gobierno autonómico frente al cierre anunciado de la Azucarera de La Bañeza, en León, haciendo un llamamiento a la unidad de los trabajadores y las administraciones para buscar soluciones que eviten la clausura definitiva de la planta. García expresó su deseo de que las tensiones entre los sindicatos no deriven en consecuencias negativas para las negociaciones, subrayando que la prioridad es proteger los empleos y las familias afectadas.
En sus declaraciones recogidas por Ical, la consejera defendió la continuidad de la actividad en la azucarera y, en caso de que esto no fuera viable, la implementación de una alternativa industrial que mantenga el empleo en la zona. “Hemos respetado el procedimiento de negociación de los trabajadores, pero nos hubiera gustado que el acuerdo pasara por mantener la actividad en la planta de La Bañeza”, afirmó García. Asimismo, destacó la importancia de pasar de un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) a un Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) para evitar despidos colectivos.
La Junta de Castilla y León mantuvo reuniones recientes con el comité de empresa y la propia Azucarera, la última el pasado viernes con los representantes de los trabajadores y el martes con la empresa, insistiendo en la necesidad de encontrar una solución alternativa. García también solicitó el apoyo del Gobierno de España para reforzar las negociaciones y mantener la actividad en la planta. “Hacemos un llamamiento a la unidad máxima de los trabajadores, porque hablamos de empleos y familias”, recalcó.