La Junta exige fiscalidad diferenciada para Soria, pese a que Mañueco calificó tratar distinto a las provincias como “insolidario”
No hace dos días que el presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, criticó en el Pleno de las Cortes a los representantes de SoriaYA que pretendieran “una subasta entre partidos localistas” afirmando que no quería “pasar a la historia como el Sánchez de Castilla y León”, por lo que no permitiría “insolidaridad entre las provincias” de la Comunidad como forma de luchar contra la despoblación.
Pues hoy, el portavoz y consejero de Economía y Hacienda de la Junta, Carlos Fernández Carriedo, interpeló en la rueda de prensa del Consejo de Gobierno autonómico al Gobierno central para que “ponga en marcha de una vez por todas” la fiscalidad diferenciada para la provincia de Soria, con una rebaja del 20 por ciento en los costes laborales de la Seguridad Social, como autorizó la UE.
Carriedo lamentó que seis meses después de incluir esta medida en los presupuestos generales del Estado, aun no se ha implementado, y recordó que fue un logró de los presidente de las autonomías de Aragón, Castilla-La Mancha y Castilla y León.
Frente a esta falta de actuación del Gobiero, Carriedo defendió que la Junta ofrece una fiscalidad diferenciada para el medio rural, con deducciones específicas adicionales en el IRPF, y en la nueva rebaja fiscal para 2023, en tramitación, y ampliando las ventajas en transmisiones patrimoniales y otros tributos.
Asimismo, destacó que en esfuerzo inversor, el Ejecutivo autonómico apuesta por el equilibrio, y destina más fondos a los territorios que “más lo necesitan y más carencias tienen”.