La polémica en las elecciones a rector de la Universidad de León empieza antes de que, oficialmente, comience la disputa electoral por el birrete negro. Según ha podido conocer ILEÓN la Junta Electoral de la Universidad de León ha retrasado la proclamación definitiva de candidaturas al rectorado debido a una reclamación contra la precandidata Nuria González, a la que acusan de no cumplir los requisitos legales contemplados en la Ley Orgánica del Sistema Universitario.
El pasado 5 de abril la Junta Electoral proclamó como candidatos provisionales a los tres nombres anunciados, la catedrática Nuria González como continuidad del actual rector García Marín, al catedrático Juan José Fernández y a la catedrática Teresa Mata Sierra. Este martes 9 de abril debería haber proclamado las candidaturas definitivas, pero no lo hizo ante una reclamación contra la candidatura de González.
En el caso de la catedrática se cuestiona si cumple los requisitos de la Ley Orgánica del Sistema Universitario, en vigor desde marzo del 2023. En ella se producen varios cambios sobre las elecciones a rector, que pasan a ser mandatos únicos de 6 años, y que señala que podrán ser candidatos “personal docente e investigador permanente doctor a tiempo completo y reunir los méritos de investigación, docencia y experiencia de gestión universitaria que determinen los Estatutos”. Esto supone un cambio respecto al modelo antiguo que solo dejaba ser candidatos a catedráticos.
Pero mientras los Estatutos de las universidades se adaptaban a la nueva normativa en un plazo de dos años, cosa que la Universidad de León todavía no ha hecho, se especifica en la disposición transitoria primera que los requisitos será “como mínimo estar en posesión de tres sexenios de investigación, tres quinquenios docentes y cuatro años de experiencia de gestión universitaria en algún cargo unipersonal”.
En el caso de Nuria González en su condición de vicerrectora no acumula los cuatro años completos en cargo unipersonal, ya que fue nombrada en el actual mandato de Marín que tomó posesión avanzado el 2020, pero alegó haber ocupado además el cargo de secretaria de la Escuela de Doctorado, que consideran asimilable a una facultad o escuela por lo que superaría los años requeridos. Por contra, los reclamantes señalan que ese puesto alegado no es órgano unipersonal como tal según los Estatutos, por lo que ponen en cuestión que cumpla los requisitos necesarios para ser candidata.
La Junta Electoral debe ahora resolver la reclamación bajo la posibilidad de que el proceso electoral puede acabar en los tribunales, según fuentes al tanto del proceso. Se volvería así a una situación de controversia jurídica como cuando en el año 2016 García Marín ganó de forma inesperada las elecciones e intentaron darle la vuelta la resultado forzando una nueva interpretación de la contabilización del voto, que llevó a una segunda vuelta donde Marín arrasó.
Las elecciones a rector de la Universidad de León están previstas para el 9 de mayo en primera vuelta, y para el 28 de mayo una segunda vuelta con los dos más votados si ningún candidato consigue el 50,01% del voto ponderado en la primera. Ahora todo está en el aire desde el minuto uno por la validez, o no, de todas las candidaturas.