Una polémica macroplanta de energía fotovoltaica que se había proyectado para instalarse en el municipio de Pajares de los Oteros retoma su marcha hacia adelante, con apoyo previo del Ministerio de Política Territorial, a pesar de que había obtenido un valapalo desde el punto de vista medioambiental de otro ministerio, el de Transición Ecológica y el Reto Demográfico.
El Boletín Oficial de Estado (BOP) publica este viernes el anuncio del área de Industria y Energía de la Subdelegación del Gobierno en la provincia de León de que nuevamente el proyecto, denominado Caelum IV y promovido desde 2021 por una empresa con sede en Sevilla, se somete a información pública en la parte de los cambios que la compañía ha introducido para 'sortear' el veto ambiental. Es decir, que nuevamente se puede consultar en detalle y plantear alegaciones ante los cambios introducidos.
Sin embargo, curiosamente, y a pesar del veto ambiental, este proyecto dispone de autorización administrativa previa que se otorgó a Caelum Renovables SL para desarrollar este mismo macroparque hace un mes, en mayo de 2023.
La modificación del proyecto que ahora se airea públicamente apenas cambia sus principales parámetros. Por un lado, sitúa ahora la potencia de futura generación de energía en 106,43 megavatios, asegurando que se “aumenta su potencia instalada”, aunque en realidad el proyecto original la situaba en 119,2 MW. Eso no toca una sola de las placas o módulos solares previstas, que siguen siendo 270.918, ni apenas tampoco la inversión, que ahora subiría hasta prácticamente 51 millones de euros (50.959.783 euros) cuando antes era de 50,4 millones de euros. La superficie total se elevará a 226,5 hectáreas y todas ellas de cultivo, algo que en su día ya criticaron, entre otros, la organización profesional agraria Asaja.
Técnicamente, uno de los mayores cambios que se destacan se refiere a que ahora se soterran la línea eléctrica de evacuación de la planta fotovoltaica hasta el punto de enganche con la red, que previamente se había contemplado con torres y cableado aéreo, e igualmente bajo tierra la línea que ha de llegar a la subestación Pajares.
Se ajustan o descartan, así mismo, algunas parcelas, zonas y secciones, que se cambian por otras, de modo que la publicación del BOE incluye ya ahora la titularidad de los terrenos, teniendo en cuenta que aunque la macroplanta iría en suelo del municipio de Pajares de los Oteros, las diferentes líneas también afectan a Gusendos de los Oteros, Corbillos de los Oteros y Santas Martas, donde se sitúa la subestación de Luengos.
Con tales cambios, la empresa defiende que “se atiende a todos los condicionantes establecidos en el informe de determinación de afección ambiental” negativo de 21 de octubre de 2022, y lo asegura demostrar con una “declaración responsable” que ha emitido hace escasas semanas el propio promotor, el 25 de mayo de este año. El nuevo plazo de alegaciones es de 15 días y se puede consultar aquí toda la documentación disponible.