Boardwalk Empire

Santi Fernández

La serie protagonizada por Steve Buscemi se sitúa, con una sola temporada, dentro de una élite en la que se sitúan series como Lost o Los Soprano.

Cuanto Martin Scorsese pone sus ojos en la novela “The Birth, High Times, and Corruption of Atlantic City” de Nelson Johnson no es capaz de quitársela de la cabeza, y esta idea remitente se convierte en serie televisiva de la mano de el propio Scorsese, productor, Terence Winter, director, también director de Los Soprano y Mark Wahlberg , también productor de Entourage.

Nos situamos en los años 20, la ley seca se impone en EE.UU. y Atlantic city se pone a la cabeza del tráfico ilegal de alcohol, allí es donde emerge la figura de “Nucky” Thomson, un influyente político de la ciudad y, a su vez, el mayor contrabandista de la ciudad. Este doble juego entre la imagen pública de “Nucky” y la oculta es uno de los ejes principales de la trama.

Junto a Steve Buscemi, Nucky Thomson, destaca el papel del emergente Jimmy Darmory el también emergente Michael Pitt y por último Kelly McDonald como Margaret Schroeder.

La serie llega precedida de toda clase de premios, ganadora del último Globo de Oro a mejor serie dramática y Steve Buscemi también ganador a mejor actor en series dramáticas, además de conseguir colarse entre las diez mejores series para el American Film Institute en el pasado 2010.