PP y Vox salvan de la reprobación a García-Gallardo, que insiste en tachar al PSOE de “banda criminal”
El pleno de las Cortes volvió a vivir este miércoles momentos de tensión en el debate de la proposición no de ley del Grupo Socialista para pedir la reprobación del vicepresidente de la Junta, Juan García-Gallardo, por llamar a este partido “banda criminal”, en un calificativo que reiteró en el hemiciclo en esta misma sesión.
Es la segunda vez que el PSOE pide la reprobación de García-Gallardo, después de hacerlo el pasado mes de junio cuando “insultó” a la procuradora con discapacidad Noelia Frutos. “Por algo que no era verdad”, dijo el vicepresidente, que, por el contrario, volvió a señalar al PSOE como “banda criminal” y advertir de que los jóvenes conocerán “su historia criminal”.
El debate se desarrolló entre el rechazo por la socialista Patricia Gómez a “las barbaridades” vertidas por García-Gallardo y la critica a “la complicidad” del presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, y la acusación del vicepresidente a los socialistas por “callar y asentir ante los actos incorrectos de su jefe, Pedro Sánchez”.
En ese cruce de acusaciones y subida del tono, el presidente de las Cortes, Carlos Pollán, llamó al orden y retiró el uso de la palabra poco después a Pablo Fernández (Podemos), tras calificar de “fascista” la ideología de García-Gallardo, pero no hizo lo mismo con las palabras que dejó en el hemiciclo el vicepresidente, por lo que fue acusado de “falta de objetividad” por Francisco Igea (Cs), que tildó de “vergonzoso” su comportamiento.
En la presentación de la iniciativa, la procuradora socialista Patricia Gómez argumentó que llamar “banda criminal” al PSOE supone no respetar la pluralidad ni los valores democráticos y aseguró que el presidente de la Junta es “cómplice” al consentir las descalificaciones de Vox.
Gómez sostuvo que el partido al que Juan García-Gallardo llamó “banda criminal” es autor de todos los avances sociales de España, reparó una deuda con las víctimas del franquismo y afirmó que los socialistas siempre van a estar al lado de quienes defienden la democracia.
“El vicepresidente ha demostrado que no está a la altura que merece esta tierra, la pregunta es si lo está el presidente”, concluyó Gómez. “Cada una de sus intervenciones ha sido una ofensa o un menosprecio a jóvenes, a mujeres, a personas con discapacidad, a sindicatos”, recoge la PNL socialista.
García-Gallardo cargó en su intervención contra la política del PSOE en la lucha terrorista contra ETA, su pacto con Bildu o la propuesta de suprimir el delito de sedición o plantear la reforma del de malversación, mientras los socialistas “callan y asienten con los actos incorrectos de su jefe, Pedro Sánchez”. “Es un silencio cómplice con los actos de su jefe, el jefe de su banda”, anotó.
“Su silencio cómplice favorece las conductas de delincuentes que les mantienen en el Gobierno. No se escandalicen. Sin su silencio cómplice no cometería los actos de traición de vender la patria”, siguió García-Gallardo. “Encubrimiento y colaboración”, añadió, para advertir de que los jóvenes van a conocer “la historia criminal del PSOE”.
Patricia Gómez, que afirmó estar esperado a que se llame al orden a García-Gallardo, rechazó “lecciones en la lucha contra el terrorismo” al partido que terminó con ETA y subrayó que el vicepresidente de la Junta puede presentar su ideología gracias a la lucha de los socialistas.
“En qué han convertido nuestra tierra”, aseveró Gómez, que culpó directamente a Alfonso Fernández Mañueco del “deterioro institucional” por permitir la entrada de Vox en el Gobierno de Castilla y León. “Señores del PP bajen la mirada, qué flaco favor hacen a la democracia, a qué bajo precio han vendido a esta tierra”. “Lo terrible y penoso es que hoy ustedes del PP no se diferencian nada de ellos”, zanjó.
En un tono conciliador, el popular Ramiro Ruiz Medrano recordó que antes el respeto era una seña de identidad, afirmó que hoy podría ser un buen día para recuperar ese espíritu de ilusión por la política y se preguntó si no estaban hablando demasiado de ellos y poco de la gente.
Ruiz Medrano argumentó que la PNL omite que de lo que se ha hablado en el hemiciclo “no existe” porque el presidente de las Cortes “tomó la decisión y no existe” en el ámbito parlamentario, en referencia a que retiró las palabras de García-Gallardo.
“Se puede discrepar mucho, pero no debemos salirnos del tiesto para tener razón o conseguir un titular”, aseveró, para abogar por el respeto y por hablar de los problemas de las personas. “Prefiero seguir mi dieta, el respeto y la concordia”.
Un pobre hombre
Francisco Igea confesó que no sabía lo que iba a votar aunque añadió que merece la reprobación porque está “sin educar” y el puesto le queda lejos, pero señaló al PSOE que Fernández Mañueco utiliza a García-Gallardo mientras él está cómodo. “Es usted un pobre hombre”, se refirió al vicepresidente de la Junta. “Ustedes, señores del PP, no son mejores de este triste personaje que ocupa la vicepresidencia”, zanjó.
Por su parte, Pablo Fernández anunció el voto a favor de la PNL y afirmó que el vicepresidente profesa “la ideología fascista”, por lo que fue llamado al orden por tercera vez por el presidente de las Cortes y tuvo que abandonar la tribuna.
La leonesista Alicia Gallego, que afirmó sentirse “despistada” ante los insultos, descalificaciones y faltas de respeto en el hemiciclo, manifestó que las palabras gruesas desvirtúan el fin de la política, indicó que no es un honor ser el político para el que más veces se pide la reprobación y señaló que el PP es “cómplice” por permitir esta situación.
Gallego instó a García-Gallardo a trabajar en la solución de los problemas en vez de “ir a sus cosas” y puso como ejemplo a alcaldes pedáneos que, sin tener un sueldo como el que tiene el vicepresidente, se dedican a trabajar por la gente. “Hay que bajar el tono, para qué la crispación”, aseveró.
