Al campo a buscar setas y castañas, las reinas gastronómicas del otoño leonés

Castañas y setas. Así es el combo ganador de la gastronomía de la provincia de León en otoño, cuando las temperaturas caen y las hojas de lo árboles adquieren mil tonalidades y es el momento de mirar al suelo y encontrar dos de los productos más sabrosos y grandes que produce nuestra tierra.

En ILEÓN hemos salido al campo esta semana a comprobar de primera mano el estado de la cuestión, es decir de la producción, aunque con resultados muy diferentes. Ni una sola seta hemos podido encontrar, además de algunas 'minis' de las que tomar imágenes, pero la cosecha de castañas bercianas tiene buena pinta tras el pobre resultado de la del año pasado.

Por tierras del Curueño y del Torío hemos paseado en busca de setas, ataviados con cesta y navaja, incluso muy cerca del famoso lugar por donde Jesús Calleja llevó a buscar setas a la exvicepresidenta del Gobierno Soraya Sáenz de Santamaría, con un resultado infructuoso. Pese a que el terreno estaba mojado y la temperatura era estable no ha sido posible localiza algún boletus o níscalos, habituales por la zona de recorrido realizada.

Las imágenes de pequeños hongos que acompañan este reportaje son los únicos testimonios que hemos podido recopilar, bien porque se nos hayan 'adelantado' otros seteros, bien por la falta de pericia de quien escribe o bien por la escasez de setas. Y seguramente por una combinación de todas.

Ya desde la Asociación Micológica San Jorge han explicado, en la presentación de la Semana Micológica de León que empieza este lunes, que la nieve caída en los últimos días ha sido muy perjudicial para la campaña de recogida de este otoño, en la que había grandes expectativas. El frío es uno de los factores que impiden su proliferación y también puede acabar con muchos de los ejemplares que ya se habían desarrollado. La nieve, han añadido, ha acabado con las esperanzas de una gran campaña de setas que se preveía si las temperaturas seguían siendo suaves y se mantenían las lluvias.

Según la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) las precipitaciones entre septiembre y noviembre de este año han estado muy por debajo de los niveles medios de las últimas tres décadas, aunque sin ser tan extremo como los del año pasado. El avance de previsión mensual indica que podría haber lluvias abundantes entre el 5 y el 11 del mes, que si se combinan con las temperaturas habituales o incluso algo más cálidas de lo habitual podrían 'salvar' la temporada setera.

Este año cabe recordar la entrada en vigor el año pasado del Decreto por el que se regula el Recurso Micológico Silvestre en Castilla y León. Entre sus aspectos más relevantes, de obligado cumplimiento, están la limitación de recogida de 3 kilos por persona y día en zonas no reguladas. En la provincia existen además tres grandes montes regulados -en Almanza y Montaña Oriental (Río Cea) y Santa Colomba de Somoza (Camino de Santiago)- en los que hay que hacerse con un permiso especial para poder recolectar.

Desde la aoaciones micológicas recuerdan a todos los aficionados que deben extremar la precaución cuando salgan al campo a recoger setas para evitar las intoxicaciones que se pueden producir con setas no aptas para el consumo humano, pero también por setas en mal estado o que presenten una importante cantidad de toxinas por, por ejemplo, estar próximas a las carreteras. Y este año se pide especial cuidado con la 'pedo de lobo', por la investigación sobre sus propiedades curativas.

De castañas por el Bierzo

El valle de Noceda del Bierzo, uno de lo epicentros de la producción de castaña de la comarca berciana, ha sido el lugar elegido por este periódico para comprobar cómo va este año la cosecha, en esta ocasión con un resultado esperanzador. Castañas de buen tamaño para ser 'parede', de calibre inferior a la 'gallega' y de mejor sabor, que permiten avistar una buena cosecha para resarcir la desastrosa del pasado año.

Las heladas de primavera y la sequía del 2017 provocaron en el Bierzo una notable bajada de la cosecha de castañas, que llegó a ser dramática en algunas zona con una producción de entre el 10 y el 20% de lo habitual, como fue el propio valle de Noceda, con amplias zona sin ningún fruto y otras con escaso.

Pero la temprana nevada de octubre de este año ha provocado que en algunos valles de la geografía berciana los castaños se hayan vencido al no poder aguantar el peso, al tener todavía la hoja en sus ramas y los erizos verdes. Esto provocará una merma de la cosecha, sobre todo en zonas como el Alto Sil, el Bierzo Bajo y Ancares.

Pero en nuestro vistazo a Noceda el resultado ha sido prometedor, con algunas zonas con un producto más que destacable y en buen estado, lo que ha tirado hacia arriba de los precios en un año que al menos compensará en parte el mal ejercicio anterior.

Cabe recordar que los castaños tienen propietarios particulares, fácilmente distinguibles por tener más o menos cuidado el terreno donde caen los erizos, por lo que su recolección en una escapada a la naturaleza no es, ni mucho menos, libre.

Pero se vaya a setas o a castañas o bien de siemple paseo, el otoño es la excusa perfecta para conocer un poco más de la impresionante naturaleza leonesa. Y si, además, luego se puede saborear, mejor que mejor.