La semana que arranca presenta un panorama desolador en cuanto a dificultades de comunicación básica de la provincia de León con las comunidades vecinas de Asturias y de Galicia, en ambos casos afectando a infraestructuras importantes y esenciales y que evidencian el mal estado de algunas infraestructuras en la red principal de carreteras.
El último caso se precipitó este domingo cuando saltó por la mañana la noticia del derrumbe de toda una ladera sobre los cuatro carriles de la autopista AP-66 León-Asturias, la conexión principal de León con el Principado y viceversa, que al menos por fortuna no causó daños personales a ninguno de los muchos conductores que a diario usan esta carretera de peaje que atraviesa la Cordillera Cantábrica.
El gran argayo se produjo a la altura del punto kilométrico 76, muy cerca del entorno del área de descanso de Entrerregueras de la autopista del Huerna, y de manera inmediata dejó totalmente en desuso la autopista, iniciándose los primeros trabajos de coordinación por parte de la empresa que gestiona la autopista, Aucalsa, y el Ministerio de Transportes. Ninguno de los dos pueden dar un plazo de cuándo permanecerá la total incomunicación de la AP-66, limitándose a comprometer la máxima urgencia posible para ir asegurando la zona y habilitando al menos algún carril de paso.
Mientras, la vieja carretera del puerto de Pajares por la N-630 se verá sometida a una inmensa presión de exceso de tráfico, anto de usuarios particulares como de todo el gran flujo de transportes por carretera, algo que ya se pudo apreciar este mismo domingo con retenciones y problemas en varios puntos, obligando a un mayor refuerzo de la presencia de la Guardia Civil de Tráfico.
Desde uno de esos puntos, el alcalde de Villamanín, Félix Barreales, ya ha reclamado públicamente en las primeras horas que desde la Subdelegación de Gobierno en León se regule de manera muy especial el tráfico en lo que es un habitual “punto negro” del municipio, en el cruce de la N-630 con la comarca de Arbas y Luna a través de la collada de Aralla.
El regidor suma la habitual ausencia de iluminación a un desdoblamiento de la carretera en cinco carriles, con dos stops en el interior de la carretera, carriles de incorporación y salida de los desvíos habilitados. Por eso aprovechan para insistir en reclamar cuanto antes una pasarela de acceso, como “se planteó en su día”, o una rotonda en ese cruce en la que según la Diputación ya los técnicos están trabajando. Una situación que se ve además comprometida por la habitual gran afluencia de comensales en el restaurante Ezequiel de Villamanín, como publicó ILEÓN, que aún será más grande mientras se mantenga cortada la autopista.
En el oeste de la provincia, muy cerca de la frontera con Galicia, persiste el problema que provocó ya hace año y medio, en junio de 2022, el derrumbe del viaducto de El Castro en la comarca de El Bierzo, cortando la autovía del Noroeste A-6 y forzando a una ambiciosa intervención del Ministerio para ponerle fin al problema. El último plazo oficial para conseguir reabrir la zona con normalidad se fechaba en torno a esta fecha, casi finales de 2024, aunque ahora mismo no se puede concretar en el calendario.
Mientras, los trabajos en este punto continúan compometiendo el tráfico normal y causando importantes cortes, ahora de carácter parcial, y desvíos que provocan muy a menudo importantes retenciones. Así, esta misma semana se había anunciado y se mantienen nuevos cortes totales de tránsito en la A-6 durante cuatro noches desde este lunes cuatro, entre los kilómetros 432 y 422 y en sentido Madrid, en el Bierzo Oeste, ya cerca de la frontera gallega con Piedrafita del Cebreiro.
El itinerario alternativo para el tráfico sentido Madrid se habilita a través de la N-VI y se encuentra debidamente señalizado. La calzada izquierda, en el tramo afectado, se encuentra en servicio desde diciembre de 2023 con un carril de circulación sentido Madrid. Los cortes durante esas cuatro jornadas son entre las 22.00 las 7.00 horas, hasta que el viernes 15 de noviembre se restrablezca cierta normalidad.