El pasado mes de julio en la provincia de León se matricularon 415 vehículos, y, de ellos, la mitad ya eran vehículos híbridos o eléctricos, según los datos de las patronales del sector. De momento los vehículos híbridos suponen ya la mayoría de las matriculaciones de vehículos nuevos en la provincia leonesa, con los eléctricos puros pujando por hacerse un hueco en la nueva movilidad. Y hay empresas leonesas que ya apuestan de forma decidida por esta movilidad, más sostenible y que permite una mayor autonomía de transporte a un coste mucho más reducido.
Roberto Peña Postigo, fundador de VoltaZero, proveniente del sector de la automoción con un taller tradicional de León vio clara la necesidad de ampliar miras. “Siempre hemos apostado por la formación, y dicho proceso formativo nos ha llevado los últimos años hacia el camino del vehículo eléctrico. La inquietud por los vehículos eléctricos nos hizo a iniciar un proceso como partner de Wallbox”, y entonces fundó Voltazero.
“El aumento de la demanda de instalaciones de puntos de recarga nos hizo diversificar en lo que hoy en día es Voltazero. Una empresa especializada en instalación de puntos de recarga, asesoramiento energético e instalaciones solares y eficiencia energética. Ofrecemos servicios a nivel nacional a través de la red de distribución de recambios CGA”, describe Roberto. Comenzaron a trabajar con Wallbox cuando la compañía estaba iniciando su proceso de expansión. Hoy en día este fabricante español de cargadores ofrece servicios en más de 113 países, siendo líder mundial del sector y cotizando en el DowJones de nueva York.
Del surtidor al cargador
A pesar del crecimiento que está viviendo el coche eléctrico, el profesional reafirma que no es para todo el mundo. “Debes de circular más de 15.000 kilómetros al año y no superar los 200 kilómetros al día, aunque es un rango muy general y fácilmente ampliable según la necesidad de cada persona”, expone Peña. Es un vehículo ideal para empresas de reparto con el uso muy localizado. “Poniendo como ejemplo a una empresa leonesa, recorre al día en tareas de reparto una media de 200 km, 4400 km al mes, con un coste de combustible de 688 euros mensuales, esa misma empresa actualmente tiene un gasto de 17 kw/100 km, el coste de la energía medio es de 10cts, lo cual se traduce en 1,7 cts cada 100 km o 74,80 euros al mes”, calcula sin mucho esfuerzo el profesional.
Los beneficiados son, particulares y autónomos hasta el 70% de la base imponible subvencionable, llegando al 80% en municipios de menos de 5000 habitantes. Para empresas corresponde el 40% y el 80%”
Por lo que se deduce que entre los beneficios más reseñables ante optar por un coche eléctrico es el ahorro en combustible, pero también: ventajas fiscales, ahorro en mantenimiento, disminución del ruido. Las ventajas fiscales hacen referencia al ‘Plan moves III’, que recientemente se ha prolongado hasta diciembre de 2024. “Los beneficiados son, particulares y autónomos hasta el 70% de la base imponible subvencionable, llegando al 80% en municipios de menos de 5000 habitantes. Para empresas corresponde el 40% y el 80%”, enumera el profesional.
Algo que preocupa mucho sobre el funcionamiento de los coches es el tiempo de carga de la batería. Tiempo que va en función de la capacidad que tenga la batería del coche y de la velocidad de carga, que dependerá de la cantidad de energía por hora que podamos introducir en cada momento. Por ejemplo, un vehículo híbrido de 10kw/h de capacidad cargando a 2,5kw cada hora tardaría cuatro horas. “Solemos hacer un símil con el combustible: si tengo un depósito de 50 litros y la manguera me da 10 litros cada hora, tardo 5 horas en llenar el depósito”, ejemplifica Roberto. Hay que tener en cuenta que ya existen sistemas de carga con capacidad de 250 kw/h permitiendo cargas de 25 km de autonomía por minuto de carga. “La realidad es que nuestros clientes particulares con vehículos eléctricos cargan de media dos o tres noches a poca potencia y les sobra autonomía para cubrir la semana”, expone casos reales y testados.
Realizan instalaciones de puntos de recarga y eficiencia energética en casi todas las ubicaciones, comunidades de vecinos, viviendas unifamiliares, empresas, organismos públicos, etc. “La ley es clara en permitir el uso de zonas comunes para que se pueda realizar la instalación y por lo general suele haber buena colaboración con los administradores y presidentes. Técnicamente a veces es más complejo, sobre todo si son edificios antiguos”, puntualiza. Muchas de estas instalaciones la realizan con Soltra, un grupo empresarial sin ánimo de lucro, que busca la inserción laboral de personas con discapacidad. “Se conforma por un conjunto de empresas especializadas en actividades industriales y servicios que ofrecen soluciones eficaces cumpliendo con los objetivos con calidad y competitividad. Estamos presentes en España, México y Dinamarca”, expone David Sordo García, director Calidad y M.A. Soltra. Tanto Roberto desde Voltazero como David en Soltra consideran que es un sector en expansión pendiente de madurar y ofrecen su asesoramiento.