El Ayuntamiento de San Andrés del Rabendo homenajea a sus vecinos y vecinas centenarias. En los últimos días, han cumplido cien años dos de ellas que, además de celebrarlo con sus seres queridos, han recibido un obsequio conmemorativo del Consistorio, entregado por la propia alcaldesa, Ana Caurel, y la concejala de Asuntos Sociales, Amparo Blanco.
La primera homenajeada ha sido Gregoria Laiz que cumplió 100 años el pasado jueves 26 de septiembre. Nacida en San Andrés del Rabanedo en 1924, ha residido siempre en el municipio. De una familia de cuatro hermanas, la ahora centenaria tuvo dos hijos, aunque perdió a uno de ellos cuando era joven. No tiene nietos, pero sí un buen número de sobrinos y de allegados que han celebrado con ella esta fecha tan especial.
Ama de casa durante toda su vida, Gregoria, una persona “poco habladora”, siempre ha destacado por su carácter amigable y afable con sus vecinos. “Todo el mundo la quiere y la respeta porque es la mayor”, ha asegurado su hija.
Gregoria Laiz, además, ha sido en los últimos años una activa participante de los talleres del programa ‘Vida Activa’ de la Concejalía de Asuntos Sociales, destinado a personas mayores de 60 años en el municipio.
Ana Caurel y Amparo Blanco entregaron a la homenajeada un ramo de flores y una placa como muestra de “cariño y afecto, de parte de todos los habitantes del municipio”. “Es un orgullo que podamos tener en el municipio personas como Gregoria, que son ejemplo de tesón, de esfuerzo, de lucha y de sacrificio”, señaló la concejala de Asuntos Sociales.
La fiesta siguió este lunes, con el cumpleaños de Amelia Crespo, en la Casa de Cultura de Pinilla, el barrio en el que la homenajeada lleva viviendo 60 años.
La alcaldesa de San Andrés del Rabanedo, Ana Caurel; la primera teniente de alcalde, Ángeles González; y la concejala de Asuntos Sociales, Amparo Blanco, han participado en esta celebración, a la que ha acudido también parte de la familia de Amelia, así como vecinas de la centenaria y trabajadoras del área de Asuntos Sociales del Ayuntamiento.
El equipo de Gobierno, en “nombre de todos los vecinos del municipio”, ha hecho entrega a Amelia Crespo de un ramo de flores y de una placa conmemorativa para esta mujer, nacida en Villanueva del Árbol el 30 de septiembre de 1924, y que goza de una salud y de una vitalidad “envidiables”, tal y como ha señalado la concejala de Asuntos Sociales, Amparo Blanco.
Amelia Crespo vive sola en Pinilla por su propia voluntad. Cuenta con apoyo del servicio de Ayuda a Domicilio del Ayuntamiento de San Andrés del Rabanedo. Es la segunda de una familia de cinco hermanos y tiene 16 nietos y 13 bisnietos. Ha dedicado toda su vida a desarrollar sus pasiones, que son la educación y la religión.
La música litúrgica y el canto gregoriano son, junto con la pintura -campo en el que demuestra un gran “talento artístico”- sus dos grandes pasiones, además de dedicar parte de su tiempo a resolver crucigramas y sopas de letras para mantener activa la mente.
La centenaria es una mujer muy querida en el barrio, donde los vecinos están siempre a su disposición para ayudar y acompañarla, como destacan sus allegados. “No esperas esto”, ha reconocido emocionada la homenajeada durante el acto, en el que ha dejado un consejo a los presentes: “Haced todo el bien que se pueda y paz en el mundo”.