La localidad de Pedrún de Torío cuenta desde febrero con un bar en el edificio de las antiguas escuelas, que son propiedad de la Junta Vecinal. Los jóvenes que son los nuevos arrendatarios iniciaron la entonces explotación y se enfrentan ahora a una difícil situación al encontrarse con que el local no dispone de la licencia como bar que, aseguran, creían que existía en el momento de la firma del contrato.
Por su parte, tanto el Ayuntamiento de Garrafe como la Junta de Castilla y León niegan que el local tenga ningún tipo de licencia para iniciar una actividad hostelera, mientras que la Junta Vecinal defiende que el uso como bar está justificado en un acta que ya no es válida.
Una situación que por el momento ha provocado ya varias denuncias a los arrendatarios del bar de la localidad perteneciente al municipio de Garrafe de Torío por parte del presidente de la Junta Vecinal, Fulgencio Bandera, que asegura que los jóvenes están llevando a cabo una serie de irregularidades e impagos del alquiler.
Las condiciones
Fue en febrero de este año cuando Nerea González y Diego Rodríguez abrieron las puertas de este local con la idea de convertirlo en un bar, después de haber firmado un contrato con la Junta Vecinal por el que pagarían un alquiler de 100 euros durante los meses de julio, agosto y septiembre y de 1 euro durante el resto del año. No eran los primeros que cogían el local para su explotación hostelera pero con ellos al frente la situación se ha enredado por las licencias existentes, o no, por el uso del local.
Al poco tiempo de su apertura, y tras una visita en marzo de la Guardia Civil al local, los arrendatarios fueron conscientes de que carecía de la licencia necesaria para ejercer como bar, a pesar de que aseguran que el presidente de la Junta Vecinal les había confirmado que sí la tenía, amparándose en un acta del Pleno del Ayuntamiento de Garrafe de Torío (del 25 de agosto de 2022) en el que se modifica el uso de una serie de antiguas escuelas del municipio, entre ellas las de Pedrún.
Sin embargo, los hosteleros todavía no eran capaces de tramitar el ‘Inicio de actividad’ del local en la Junta de Castilla y León ni de obtener la licencia a través del Ayuntamiento de Garrafe. Menos después de que la Junta rechazase las modificaciones realizadas por el Pleno municipal, ya que consideran que es “inviable”, una afirmación de la que se hace eco la sesión celebrada el 29 de febrero de este año.
No ha lugar
Así, ni el Ayuntamiento ni la Junta favorecen el uso como bar de este local porque coinciden que carece de licencia para el mismo. “No procede ningún inicio de actividad de hostelería ya que a día de hoy no existe ninguna licencia de actividad de hostelería ni de bar”, afirma el Ayuntamiento de Garrafe de Torío en una comunicación remitida a uno de los dos hosteleros tras la comunicación de inicio de actividad hostelera.
A pesar de ello, el presidente de la Junta Vecinal, con el que ha contactado este medio, afirma que la situación del bar es de “normalidad” y rechaza que la Junta Vecinal sea responsable de ningún trámite, a pesar de ser los dueños del local y de haber sido los solicitantes de una Comunicación de Actividad Alimentaria en el local a principios del mes de agosto: “Cuando ha gestionado la Junta Vecinal el local sí que se han hecho los trámites, pero nunca cuando ha habido arrendatarios, y han sido siete en 30 años”, asegura Fulgencio Bandera. Sin embargo, los hosteleros defienden que son los cuartos arrendatarios de este local que han sido denunciados por la Junta de Castilla y León por no tener licencia.
El alcalde pedáneo sigue afirmando que el acta del 25 de agosto de 2022 justifica el uso del local como bar, a pesar de haber quedado sin efecto, ya que el Ayuntamiento comenzará a finales de año o a principios del siguiente una modificación de las normativas que todavía no se ha llevado a cabo. “La licencia va con el local, no conmigo. Da igual que haga los trámites si el local no está registrado para realizar un inicio de actividad”, defiende la hostelera.
Podría caer una cuantiosa multa
Además, el presidente de la Junta Vecinal asegura que nunca han tenido problemas de este tipo con anteriores alquileres del local: “Lo que sucedió fue que tenían que haber presentado en la Junta de Castilla y León una declaración responsable de inicio de actividad. Con la presentación de esa solicitud en registro ya se puede iniciar automáticamente la actividad pero la arrendataria no lo había hecho. Ya está presentada, si el bar no tuviese permiso no podría abrir”. Los hosteleros, por su parte, defienden que sí se realizó esa declaración responsable pero fue denegada.
Entre medias, y después de una segunda visita de la Guardia Civil al establecimiento en julio, que finalizó con una denuncia de la Junta de Castilla y León por carecer de hoja de reclamaciones y de licencia de apertura, los dos hosteleros se enfrentan a una multa que podría ser de entre 9.000 hasta 90.000 euros de no presentar una Declaración Responsable.
Reproches y denuncias cruzadas
Bandera, afirma que los problemas con el local no provienen de los permisos sino del uso que están haciendo los arrendatarios. “Lo que está claro es que si no tuviera licencia el bar estaría cerrado. De momento no hay ninguna orden ni de la Junta ni del Ayuntamiento para cerrar este bar. Lo que pasa es que están haciendo cosas no permitidas”, asegura el presidente de la Junta Vecinal, que asegura que ha denunciado a los arrendatarios por colocar mobiliario urbano y causar desperfectos en el local que, según los hosteleros, han sido archivadas por la Guardia Civil.
“Espero que se cansen pronto y se vayan y si no cuando acabe el contrato en febrero pues se rescinde y punto. Vamos a respetar los turnos de arrendamiento, aunque ya debe dinero. Si siguen así en septiembre haremos una reunión en la Junta Vecinal y les instaremos a abandonar el local por impago. Si no se van en febrero cambiaremos las cerraduras e iremos al juzgado”, asegura Bandera. “Cuando llegó la propuesta de sanción se pusieron en contacto conmigo y les dije que presentasen la documentación y que consiguiesen unas hojas de reclamaciones”.
Últimas maniobras
Durante el mes de agosto, los hosteleros denuncian que la Junta Vecinal ha hecho uso del local del bar, sin reportar ningún beneficio económico a ambos hosteleros que, confirman, no han pagado el alquiler del mes de agosto: “Me estás ocupando mi puesto de trabajo, me boicotea, no me consumes… Reventamos en este sentido y tuvimos una discusión con él”, reconocen.
Como parche para esta situación, los hosteleros han presentado un inicio de actividad como Teleclub, que todavía no ha sido contestada por la Junta. Por ahora, el bar se mantiene abierto unos pocos días a la semana, aunque la situación es incierta una vez que se haya resuelto esta solicitud. “Nos dijo que tenía licencia de Teleclub pero es que tampoco la tiene. Hemos hecho este parche para aguantar agosto. El inicio de actividad va a acompañado con la licencia que tiene que dar el Ayuntamiento y no la ha dado, ni la va a dar”, afirman los hosteleros.
“Queremos que quede claro que no es que no queramos pagar una licencia ni nada de este sentido, es el presidente el que nos ha engañado diciendo que tiene licencia cuando no la tiene. Yo recrimino que me han alquilado algo que no tiene licencia”, zanjan los hosteleros.