El desarrollo del polígono logístico de Torneros, clave para el acuerdo de gobierno en la Diputación de León

Claustro de la sede de la Diputación de León, en el Palacio de los Guzmanes.

Antonio Vega

El PSOE acaricia la vuelta al poder en la Diputación de León después de 24 años. Si en Castilla y León, pese a ganar las elecciones los socialistas, el gobierno autonómico sigue en manos del PP gracias a su acuerdo con Ciudadanos, los socialistas recuperarán el Palacio de los Guzmanes gracias a un acuerdo con Unión del Pueblo Leonés, que será votado este jueves.

Los leonesistas reunirán en la tarde del jueves a su Consejo General, máximo órgano entre congresos, en el que la treintana de miembros votarán si formalizan un acuerdo de gobierno en la Diputación de León con el PSOE, haciendo por tanto presidente al alcalde de Camponaraya, Eduardo Morán, o bien con el PP haciendo presidente de nuevo a Juan Martínez Majo si Ciudadanos lo permite.

Las negociaciones abiertas tanto con PP como con PSOE se han formalizado en documentos de propuestas “mejorables”, pero fuentes leonesistas consideran mejor y más realista el del PSOE. Será la segunda reunión del Consejo General de UPL para abordar este asunto, tras una primera de amplio debate sobre si descabalgar al PP o dar el poder al PSOE, de la que ya saldrá una propuesta de voto para que ejerza el independiente Matías Llorente, su diputado provincial coaligado con el partido leonesista e histórico miembro en el plenario del Palacio de los Guzmanes.

El acuerdo será, además, de gobierno ya que UPL exige ser parte ejecutiva donde se harían con una vicepresidencia. Entre las claves de este posible acuerdo con el PSOE, según ha podido conocer este periódico, está el compromiso de desarrollar por fin el polígono logístico de Torneros, una vieja aspiración de infraestructura vital para el desarrollo económico de la provincia que lleva años varada sin que ninguna inversión para su puesta en marcha. En este punto clave los leonesistas se fían más del compromiso del PSOE, que lleva años reclamando el proyecto aunque no ha habido pasos decisivos durante el breve primer gobierno Sánchez, que del PP que lleva años obviando y rechazando el asunto tanto desde el gobierno autonómico como del municipal.

El compromiso de gobierno propuesto entre PSOE y UPL recogerá que sean los leonesistas los que se encarguen de áreas como la gestión de las obras en los municipios y pueblos, además de otros asuntos como gestión cultural para un enfoque de puesta en valor de la cultura leonesa.

De ratificarse el acuerdo, el “más probable” según fuentes leonesistas, la Diputación de León volvería a tener así un presidente socialista, el cuarto de las siglas después de que Agustín Turiel fuera el último en 1995. Después de Turiel llegó el popular José Antonio Diez Diez, Javier García-Prieto, Isabel Carrasco y Juan Martínez Majo.

El resultado de las elecciones municipales dejó la composición de la Diputación de León con 12 miembros del PSOE, 11 del PP, uno de Ciudadanos y uno de UPL. Los socialistas, que expresan “cautela y prudencia” ante el posible acuerdo, se mantienen a la expectativa pero confiados en que el 19 de julio, fecha de constitución del nuevo pleno provincial retomen la gestión del Palacio de los Guzmanes.

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