Veinticinco años del legado leonés de Vela Zanetti

Miriam Badiola / ICAL

León es sinónimo de Vela Zanetti. A pesar de haber nacido en Milagros (Burgos), allá por 1913, José Vela Zanetti se mudó a la capital del viejo reino cuando aún era un niño y fue precisamente ahí donde comenzó su formación, pero también donde tuvo su primera exposición, en 1931, y donde se le dio la oportunidad de viajar a Italia para continuar formándose, gracias a una beca concedida por la Diputación provincial.

A pesar de haberse exiliado a América con motivo de la Guerra Civil Española y de haber fijado en la década de los 60 su residencia en Burgos, León siempre estuvo en el corazón de Vela Zanetti. Tanto fue así que en la década de los 90, concretamente el 1996, cuando el artista aún estaba en vida, se creó la Fundación que lleva su nombre.

Situada a escasos metros de la Catedral, en la Casona del Corral de Villapérez, la Fundación cuenta con una amplia selección de obras de diferentes etapas del pintor y muralista, además de fotografías y documentos que permiten al visitante comprender la vida de José Vela Zanetti. Concretamente, los fonos están conformados por un total de 57 obras donadas por el artista y su familia, a las que se suman donaciones de particulares que “en mucho caso habían sido compradas y colgadas en viviendas sin que nadie pudiera saber que existían”, hasta alcanzar unas 80 obras.

La responsable de la Fundación Vela Zanetti, Patricia Fernández, explica que la misma comenzó su andadura en el año 1996, aunque ya en 1995 se habían expuesto algunas piezas. “José pudo conocer su propia fundación y eso ayudó a guiar el contexto expositivo como él mismo quería”, señala.

Una exposición que hace un recorrido por etapas, de arriba a abajo del edificio. De esta manera, la primera planta muestra unas pocas obras de juventud y otras de exilio y cuenta con una sala dedicada especialmente al gran mural que plasmó en la sede de las Naciones Unidas en Nueva York, 'La ruta hacia la libertad', conocido como 'Mural de los Derechos Humanos' que fue restaurado en el año 1998 gracias a la aportación del Ayuntamiento de León, la propia Fundación y otras entidades, de manera que “Vela tuvo la satisfacción de ver su poder gran obra maestra con un lavado de cara”. Este año, con motivo del 25 aniversario de la creación de la Fundación, se han creado unos paneles explicativos de la misma.

En la segunda planta del edificio se encuentra la parte del regreso de Vela Zanetti a España “con una fama ya conocida” aunque “trata de llegar un poco en silencio y recuperando sus raíces”. Por este motivo, una de las salas muestra sus primeras obras en territorio nacional y con las que recibió la medalla Eugenio D'Ors, Premio Nacional de la Crítica a la mejor exposición del año 1963.

Asimismo, el visitante se puede encontrar una sala dedicada a bocetos y murales, con el mural del Gran Parnaso Español y el artesonado “maravilloso y original de la casa”. Finalmente, existe una última parte en la que se muestra “toda la obra 'zanettiana' más reconocible” como son “los campesinos, bodegones, gallos y todo lo que el público más quiere venir a ver”.

Adiós a Vela

En el año 1999, tres años después de la creación de la Fundación, José Vela Zanetti falleció y la sala del 'Gran Parnaso Español', donde se encuentra ubicado el artesonado que le da nombre, acogió la capilla ardiente del artista, de modo que “la sede de su propia Fundación pudo darle el último adiós”.

Tas su fallecimiento, el Centro Cultural de la Villa de Madrid acogió una exposición compuesta por más de 165 piezas y “un catálogo maravilloso” en el que se recoge la mayor parte de la obra conocida del artista.

Sin embargo, la trayectoria de la Fundación continuaba en León llevando la obra de Vela Zanetti a pueblos y haciendo alguna publicación para “poco a poco dar a conocer la vida y obra del artista”. En 2009, tras unas obras en la sede, la Fundación Vela Zanetti reabrió al público con una exposición de El Roto, lo que “dio un impulso para poder volver a tener la Fundación en la ciudad de león”. Así, a partir de 2010 se comenzaron a acoger exposiciones temporales de otros artistas, actividades con colegios, asociaciones, visitas guiadas, talleres didácticos e incluso un programa con la Escuela de Arte para exponer trabajos de textil, grabado y vidrieras y pintura sobre vidrio, ya que “el artista quería que se le diera la oportunidad a otros jóvenes artistas”, según reconoce Patricia.

Tal es así que la Fundación ha acogido a lo largo de su historia exposiciones de otros artistas como Adolfo Álvarez Barthe, una exposición que tuvo “una absoluta bestialidad de acogida”, Ana Cristina Pastrana o Amancio González. Además, en 2006, con motivo del 20 aniversario de la misma, se celebró una exposición que reunió obras de Charo Acera, Barthe, Carlos Álvarez de las Heras, Ángel Cantero, Juan Antonio Cuenca, Carlos Cuenllas, Juan Fernández, Rosa Fierro, Manuel Ángel García, Amancio González, Roberto Gutiérrez, José de León, Olga Llamas, Marina Morla, Nadir, Nuria Palencia, Pastrana, Manuel Sierra, Nonia Villa y Karlos Viuda.

Otro de los hitos de la Fundación Vela Zanetti se produjo años antes, en 2003, cuando se procedió a la repatriación de las de las cenizas de Félix Gordón Ordás, quien inauguró el panteón de hombres ilustres del cementerio de León, “En 2002 habíamos publicado el epistolario con Vela, era una cuestión de completar un ciclo para que él, tan amigo de Vela y su padre, pudiera descansar en León. Creo que ha sido de lo más importante que hemos tenido junto a la restauración del mural de la ONU”, reconoce la responsable de la Fundación.

Una Fundación que Fernández asegura que ha tenido “una evolución muy positiva” que le ha permitido “crecer mucho”. Sin embargo “en el tema económico ha sido todo lo contrario”, ya que la crisis “ha afectado a todos y, viviendo de las instituciones, es muy complicado” porque “la Fundación se mantiene con la ayuda del Ayuntamiento de León”. De hecho, la sede está situada en un edificio municipal y este aporta “muchísimos gastos además de una subvención anual”.

XXV aniversario

Además de las láminas explicativas sobre el mural de las Naciones Unidas elaborado con motivo del XXV aniversario de la Fundación Vela Zanetti, Patricia Fernández explica que durante 2021 también se participó por primera vez en un curso del Centro de Formación de Profesorado e Innovación Educativa, llamado 'Del museo al aula', un curso online mediante el que los profesores pudieron ver qué se puede hacer en la Fundación y qué recursos se pueden hacer para las visitas guiadas de cualquier edad.

Por otra parte, en el mes de octubre se celebró una nueva edición de las rutas 'León en Vela', organizadas en colaboración con el Ayuntamiento de León y la Sociedad para el Formento de la Cultura de Amigos del País de León, mediante las que se celebró un recorrido por lo murales que José Vela Zanetti plasmó en varios lugares de la ciudad.

También en colaboración con la Red de Juderías se celebró la exposición 'Jewish Journeys/Viajes Judíos', una muestra itinerante que “recorre a través de paneles informativos y fotografías las diferentes motivaciones que el ser humano afronta a la hora de realizar un viaje”.

Pandemia

La sede de la Fundación permaneció cerrada hasta el 10 de junio de 2020 como consecuencia de la pandemia, cuando reabrió con un aforo “muy pequeñito”. Durante el periodo de confinamiento “se hizo muy poquita”.

Sin embargo, tras su reapertura, “como eran días muy tranquilos con poca afluencia de público”, se decidió ponerse “manos a la obra” con el archivo fotográfico, con el objetivo de “darle un empuje a un inventario en condiciones de las fotografías que se conserva de las piezas de Vela Zanetti”.