La aventura de nacer friki en León

El Día del Orgullo Geek, conocido en España como Día del Orgullo Friki, es una celebración que tiene lugar cada 25 de mayo. Esta fecha fue elegida en conmemoración del lanzamiento en 1977 de la icónica película ‘La Guerra de las Galaxias’.

Sin embargo, este día no sólo rinde homenaje a los fans de Star Wars, sino que también coincide con el Día de la Toalla, una festividad para los seguidores de la serie de libros inspirada en el éxito de Douglas Adams más famoso, la Guía del autoestopista galáctico de Douglas Adams, y el Magnífico 25 de mayo, en honor a los seguidores de Terry Pratchett y su universo de Mundodisco. Un conglomerado de acontecimientos que hace de este día una efeméride perfecta para representar a un colectivo de lo más variado y peculiar.

Tim McEachern organizó los primeros eventos llamados Festival del Orgullo Geek y/o Día del Orgullo Geek entre 1998 y 2000 en un bar de Albany, Nueva York. Estos eventos son considerados como un preludio al actual Día del Orgullo Friki.

En España, esta iniciativa comenzó en España en 2006 gracias al bloguero Germán Martínez, conocido en Internet como Señor Buebo, quien promovió la primera celebración del Día del Orgullo Friki en el Foro de Universo Marvel. En 2009, el Canal de la Ciencia de Canadá reconoció este día con una programación especial y eventos conmemorativos.

Sandra De Lucas

Para entender mejor qué significa ser friki en León, hablamos con Sandra De Lucas, una auténtica embajadora de la cultura geek en nuestra ciudad. Escritora, podcaster –en su programa Freaks & Friends–, bruja y artesana, Sandra comparte su pasión y su experiencia en el mundo friki.

Admite que tiene “muchas aficiones, todas ellas relacionadas con lo que se conoce ahora mismo como mundo friki”. Pero “una de las más destacables quizás sea mi afición por acabar en escenarios de eventos presentando o dando charlas sobre diferentes materias. Y a la que quizá más cariño tengo es a la escritura y la lectura de fantasía, sobre todo fantasía urbana o lo que se conoce ahora como romanas, aunque hacer Cosplay y Urbex Cosplay (Recreación de personajes ficticios y sesiones de fotos de los mismos en lugares abandonados) es otra afición friki a tener en cuenta”.

Sandra es, además, jugadora de rol, videojuegos y cartas como Magic o Neón & Acero, un juego de un artista zamorano y un gran suyo. Sus pasiones no son pocas, y muestra de ello son sus primeros tatuajes: el pentáculo de un contrato con un demonio basado en el anime de Kuroshitsuji y la Marca Tenebrosa de los seguidores de Voldemort de Harry Potter.

Hace un año fue presidenta de una asociación de Star Wars en Cantabria que ayudaba con diversas obras benéficas y hacía visitas a hospitales en las plantas de pediatría usando cosplays icónicos de la saga. “Tengo varios de Sith y la armadura de Bo Katan de la serie Mandalorian”, destaca.

También ha presentado eventos frikis durante tres años en diversas zonas de la geografía española y ha locutado anuncios. “Adoro el doblaje, siendo antaño una de mis ideas de estudio para ganarme la vida, y para mí ha sido maravilloso conocer increíbles actores como Claudio Serrano (voz de Batman), José Posada (Deadpool), Iván Jara (Howard Holowitz), Amparo Valencia (Catelyn Stark en Juego de Tronos), Jon Samaniego (Detective Pikachu) o incluso Sergio Liévana (Zoro en One Piece o Sebastian Sallow en el videojuego de Hogwarts Legacy)”, enumera a todos los profesionales con los que ha coincidido.

“He volcado todos estos pequeños frascos de frikismo en una gran batidora para montar mi propia tienda itinerante, de evento en evento, de velas naturales temáticas de diferentes series y libros de literatura. Un proyecto con ese toque mágico y esotérico que siempre me ha caracterizado”, habla con orgullo (y no sólo friki) de su pequeño gran negocio.

The Witcher’s Shop es fiel a la filosofía geek, empezando por el nombre, ya que tiene relación con un personaje de la literatura, los videojuegos y la ficción, en honor a Geralt de Rivia.

“Hasta el Cosplayer oficial de CD Projekt, estudio que crea los juegos, me hizo un clip promocional en un evento”, indica emocionada. También es el videojuego al que más horas ha echado en su vida, con más de 900 horas de juego, rivalizando con la versión online del Red Dead Redemption, la versión del oeste y con vaqueros de los míticos GTA.

Dicho proyecto también ha derivado en ‘Freak & Friends’, un programa en el que destripan series, películas y libros entre tres personas muy comprometidas y apasionadas del mundo fan, el cual graban en el estudio leonés Manuela Audio Rooms. “Un equipo entero de leoneses que ponen voz a un mundo que tiene infinitas posibilidades”, pone en valor.

Ella tiene claro que un friki “es una persona como tú o como yo, o como mis padres, mis abuelos o cualquier persona de a pie. Nada tiene que ver con el término freak que se asociaba negativamente en los años 80 y 90. Es una persona que ama y adora algo, y lo vive y hace con pasión… puede ser una pasión por el manga, el anime, la literatura o incluso los coches, los sellos o la repostería. Los forofos del fútbol son unos frikis de ese deporte. En definitiva, un friki es una persona con una pasión”, confirma Sandra sin temor a equivocarse.

Lo cierto es que, como indica la escritora, el término se ha desestigmatizado, por eso a la gente ya no le da tanto miedo decir que es un friki, llegando a ser un halago. “Aunque también está la parte de que se utiliza muy a la ligera, como cajón desastre para estar a la moda actual”, critica. Pero en general, sí que tiene mayor visibilidad y es más fácil adquirir este tipo de contenido que antes.

“Nuestros padres ya consumían anime como Mazinger Z, Caballeros del Zodiaco o Ranma 1/2… Siempre hemos estado rodeados de la cultura friki y la hemos consumido, aunque no lo supiéramos. La globalización ha permitido que esos contenidos y muchos otros sean accesibles para todos los públicos y todas las edades, así como las plataformas de streaming y las diferentes consolas, por lo tanto esto genera muchos más fans”, explica.

No es que el frikismo esté en auge, sólo hemos dejado de escondernos por miedo al qué dirán

El frikismo va en función de los gustos y aficiones, pero en el fondo todos somos frikis de algo, defiende ella. “En mi caso, por suerte o desgracia, nací siendo friki desde bien pequeña porque siempre he tenido una imaginación desbordante, lo que me llevó a la pintura y la lectura derivando finalmente en que haya sido el motor para dedicarme profesionalmente al arte, la artesanía y la escritura en The Witcher´s Shop, mi tienda de artesanía mágica y sello bajo el cual publico mis novelas”, reconoce Sandra, a la que es normal encontrar con un libro en las manos o trabajando con audiolibros de fondo. Sin embargo, otros universos (o galaxias) las supo amar con el tiempo, como le pasó con Star Wars, con la que necesitó su tiempo para apreciarla. “Así que el friki se nace y se hace, pero tienes que tener esa chispa y cultivarla”, asegura.

Con todo este contexto, es comprensible que cada vez haya más asociaciones dedicadas a eventos, jugger, literatura, hasta un club de Ludosport (que mezcla sables láser y esgrima). Además de numerosos eventos como el que se celebrará a finales de julio de la mano de una de las asociaciones emblemáticas del frikismo en la ciudad como es el Pacto de las Janas.

Hay tiendas donde se celebran torneos de cartas todos los fines de semana o incluso grandes bookstagramers que hablan sin parar de libros. “No es que el frikismo esté en auge, sólo hemos dejado de escondernos por miedo al qué dirán”, finaliza

En León, el frikismo no sólo está presente, sino que florece y se vive con orgullo. La cultura geek ha encontrado un lugar especial en la ciudad, con una comunidad dinámica y eventos que reúnen a fans de todas las edades y gustos. Así que, si te consideras un friki... ¡Que la fuerza te acompañe!