La música como forma de vida: la aventura de ser un hombre orquesta de León

El comienzo del verano no sólo marca el inicio de la estación más cálida y luminosa del año sino que también da pie a una vibrante temporada cultural festiva en pueblos y ciudades: la temporada de las orquestas.

Esta época del año es sinónimo de fiesta y diversión, donde las orquestas de música ponen banda sonora a los días más señalados de cada localidad, llenando las plazas y las calles de melodías y ritmos que van desde lo tradicional hasta lo contemporáneo. Brindan espectáculos que atraen a peñas, paisanos y niños y que animan a todos a disfrutar al aire libre, compartiendo momentos inolvidables al ritmo de la música.

Pero no cualquiera vale para subirse a un escenario y darlo todo. Aunque en la actualidad parece que la diversidad es un requisito imprescindible para labrarse un futuro profesional, lo cierto es que hay determinados sectores en los que dominar más de un perfil es necesario. Y es el caso de Gonzalo Fernández que su pasión por la música le ha llevado a convertirse en un auténtico 'hombre orquesta'. 

Cantante y compositor

Desde muy pequeño se formó en clases de guitarra. Recuerda que “durante mi adolescencia me encerraba en mi habitación a cantar y tocar covers de mis artistas más relevantes en el momento”. Hasta que con 18 años se lanzó a los escenarios de los bares de León con unos amigos. “Y hasta hoy”.

Gonzalo reconoce que nunca ha llegado a dominar del todo un instrumento pero le ha dedicado mucho tiempo al saxofón, al que considera su fiel compañero. Ahora ha vuelto a retomar clases de guitarra para seguir mejorando y desenvolverse encima de los escenarios, y también dedicó un par de años al piano, “los suficientes para poder ayudarme a componer o producir y tocar de una forma muy sencilla a la hora de acompañarme con la voz”. Pero también han pasado por sus manos bombardino, un ukelele, el bajo, la batería, cajón o todo instrumento de percusión.

Como no podía ser de otra manera, con tanta variedad, Gonzalo se siente identificado con muchos géneros musicales, y reconoce que le encanta escuchar y empaparse de todo tipo de música. “Pero sí me tuviera que quedar con uno que seguramente es el estilo con el que más cómodo me siento es con el rock o el indie-rock”, puntualiza.

A este género le ha podido dar rienda suelta cuando toca en solitario por bares y locales, generalmente de León y puntualmente en Madrid. También trabaja a dúo en bodas y algún evento por Palencia, Burgos o Salamanca, además de la provincia de León. Se trata de un auténtico hombre orquesta y como tal durante seis meses se recorre muchísimos pueblos y ciudades de diferentes comunidades autónomas: Castilla y León, Asturias, Cantabria, Madrid, Extremadura, Galicia... Pilota su grupo, ‘Clan Zero’.

Productor musical

Generalmente, Gonzalo produce pop-rock, ya que es su género natural, pero también he producido indie, soul, folk-rock y pop. Pero, sin duda, lo que más le gusta, independientemente de lo que produce, es que ningún día es igual a otro. “Aunque tenga una rutina de horarios ahora durante el invierno, siempre hay cosas diferentes que hacer: terminar de producir la canción de unos clientes, preparar y repasar repertorio de tu show en solitario, grabar una cover para subir a redes sociales para promocionarte como artista, estudiarte repertorio de la orquesta y ensayar coreografías, practicar y tomar clases de guitarra y canto para seguir mejorando, mezclar y masterizar alguna canción de un cliente o trabajar fuera de tu casa como técnico de sonido en eventos para diferentes empresas de sonido...”, enumera el artista, sin despeinarse.

Pero todo ese trajín en la temporada de verano, de mayo a octubre, lo tiene que compaginar con los viajes de la gira por toda España, aunque en los meses más intensos, es decir, en julio, agosto y septiembre, tiene que dedicar plena dedicación a la orquesta.

Tengo la suerte de que me encantan las dos y eso es un privilegio, la verdad. Es cierto que cuando se acerca el verano estás deseando empezar con la gira de la orquesta, pero cuando el verano llega a su fin estás ansioso por volver a tu estudio

Aunque teniendo en cuenta el tiempo que le dedica parece que se dedica más a su faceta de cantante, sin embargo, duda sobre cuál de sus roles le gusta más: “Tengo la suerte de que me encantan las dos y eso es un privilegio, la verdad. Es cierto que cuando se acerca el verano estás deseando empezar con la gira de la orquesta, pero cuando el verano llega a su fin estás ansioso por volver a tu estudio”. Pero él lo ve como lo más normal del mundo porque su cuerpo cada cierto tiempo le pide cambiar y tiene la suerte de poder tener ese contraste y disfrutar del proceso.

Músico 100%

No pasa desapercibido que el trabajo de Gonzalo está lleno de estímulos en todas sus facetas. Sin embargo, él tiene claro que es lo mejor de su vocación “es la recompensa personal por el trabajo bien hecho, la sensación de que lo has hecho lo mejor que has podido y te has entregado al máximo, te lo has pasado bien en el proceso y el cliente ha quedado satisfecho”. Además, si a esto se le suma un buen ambiente laboral con sus compañeros o sus clientes, siempre se hace todo muchísimo más ameno y divertido.

Sin embargo, no todo es un camino de rosas, ya que, literalmente, lo que peor lleva Gonzalo es la cantidad de viajes que hace. “En invierno entre Madrid y León, compaginando ensayos y conciertos en León y con trabajo en el estudio en Madrid; y en verano se acumulan horas de sueño entre tantos viajes, cambios de temperatura, etc.”, señala. Pero asegura estar acostumbrado así que aprovecha esas horas de furgoneta y autobús para recuperar esas horas perdidas de sueño o para rematar trabajos y planificar proyectos.

Pero este ritmo de vida no sería posible sin un apoyo detrás. “Tengo la suerte inmensa de tener buenos amigos y conocidos en mi tierrina que me apoyan plenamente tanto por redes sociales, con el contenido que subo, cantando ó produciendo, como en los conciertos que doy en solitario o con la orquesta, hacen por venir a verme y me siento muy querido y arropado por ellos”, agradece el cariño a sus groupies leoneses.