Astorga vuelve a quedarse sin cine con el cierre del Velasco

astorgaredaccion.com

Con la palabra 'Fin' sobre fondo negro, como en los finales de las películas, así el Cine Velasco se despide del público en sus redes sociales. Después de nueve años al frente, la empresa Proyectilm cierra la única sala de cine de Astorga. Quiso la casualidad que este hecho se produjera en plena celebración del Festival de Cine, que este sábado entregó su Premio de Honor a la actriz Concha Velasco.

Este viernes el Velasco, después de la sesión de cortometrajes, apagó las luces definitivamente. En declaraciones a Cope Astorga, el empresario Alberto Fuertes ha explicado que mantener la sala abierta no es rentable por la falta de público. El cine hoy tiene que competir con nuevas formas de ver películas o los nuevos hábitos de ocio, pero sin duda también la pandemia porque no se ha recuperado el número de espectadores.

La tradición cinéfila de los astorganos ha estado siempre muy arraigada. El Velasco empezó siendo teatro allá por el año 1911 y no fue hasta los años 20 del siglo pasado cuando se convirtió en cine. Después llegaron las salas del Manuel Gullón, el Tagarro, el Capitol, el Asturic, sin olvidar que los colegios de la ciudad hacían cantera con sus propias sesiones para los escolares y el Club 'Jastor' trajo a la ciudad el expresionismo alemán, como recordó Miguel Ángel Cordero en un artículo publicado en la revista Argutorio en el año 2002. La afición también la cultivaron algunos curas en los pueblos. Es el caso de Esteban Carro Celada que, cargado con las cintas y el proyector, llevaba la imagen en movimiento a sus parroquianos de La Cepeda.