La Junta de Castilla y León empieza a tramitar la ley de violencia intrafamiliar de Vox para cumplir con el pacto de Gobierno firmado entre el PP y el partido de extrema derecha que permitió a Alfonso Fernández Mañueco seguir al frente de la administración autonómica y con mayoría absoluta.
La consejera de Familia e Igualdad de Oportunidades, Isabel Blanco, defendió este jueves en la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno que se regule a través de una ley la lucha contra la violencia intrafamiliar ante un “aumento de casos” que no detalla. “Hay un plan de violencia intrafamiliar, pero ante el aumento de casos es necesario convertirlo en ley”, argumentó.
Sin embargo, preguntada por ese aumento, manifestó que, “según las últimas estadísticas publicadas, se ha duplicado la violencia filioparental, la que ejercer los hijos sobre los padres”, por lo que valoró que tenga rango de ley y no se quede en un plan y se avance en medidas de prevención.
La nueva ley de violencia intrafamiliar es uno de los puntos estrella de Vox en sus acuerdo de Gobierno con el Partido Popular, que insiste en que la nueva norma convivirá con la actual contra la violencia de género. Ambos partidos fijaron el 31 de julio para el inicio de su tramitación, en la que Blanco solo apostilló que se trabaja.