Nueve de cada diez. El 87%. Esos son los municipios de la provincia de León que no cumplen ni un solo precepto de las leyes de Transparencia. Es decir, los alcaldes que los presiden son responsables de negar la publicidad requerida por estas normas de los contratos efectuados por sus equipos de Gobiernos y los documentos de la gestión municipal a sus vecinos que obligan a mostrar tanto la ley nacional (Ley 19/2013, de Transparencia, Acceso a la información Pública y Buen Gobierno), como la autonómica (Ley 3/2015, de Transparencia y Participación Ciudadana).
Este es el resultado de una investigación realizada por ileon.com a finales de julio en la que se ha detectado que de los 211 municipios de la provincia sólo 27 tienen algo en su Portal de Transparencia en la web. En los ayuntamientos leoneses la mayoría utiliza una plantilla ofrecida por el Servicio de Asistencia de Municipios (SAM) de la Diputación en la que se incluyó un apartado de Portal de Transparencia. Sin embargo, prácticamente ningún portal ofrece un solo dato a los ciudadanos. Es de destacar que cincuenta web municipales ni siquiera tienen portal de Transparencia accesible de forma sencilla y fácil como marca la legislación.
Así, sólo en la provincia de León 184 alcaldes de 211 incumplen flagrantemente la legalidad en cuestión de Transparencia, que es considerada por los expertos el mejor medio para luchar contra la corrupción al poner en manos de los ciudadanos toda la información burocrática. Mientras que los 27 que sí lo intentan lo hacen de forma bastante irregular, con muy pocos casos en los que la intención es acercarse a la legislación; es decir, que menos de diez —entre los que se encuentran los más grandes, León y Ponferrada— ofrecen información en cantidad y prácticamente ninguno en la calidad mínima exigida por estas normativas.
El suspenso en el cumplimiento riguroso de la Transparencia es generalizado y en realidad, pese a los pocos buenos ejemplos en prácticas transparentes, ni un solo alcalde de la provincia llegaría a cumplir en sentido estricto la legislación actual que afecta a la publicidad de la gestión pública hacia los ciudadanos.
Cuatro municipios leoneses, directamente sin web
Si bien la mayoría de alcaldes no hacen nada por mostrar su gestión a los ciudadanos, al menos sus webs cumplen con el precepto mínimo de mostrar un Portal de Transparencia (aunque no lo usen). Pero existen cuatro casos en los que ya ni siquiera tienen página en Internet. Esto en sí mismo incumple ya otra ley, la 11/2007 de Acceso Electrónico de los Ciudadanos a los Servicios Públicos, que obliga a mantener una web municipal en Internet para garantizar el Derecho de relacionarse con las Administraciones Públicas por Medios Electrónicos.
Son los municipios de Escobar de Campos (el más pequeño de la provincia con 46 habitantes), que ni siquiera tiene dirección web; y los de Urdiales del Páramo, Valverde-Enrique y Villaornate y Castro, que aún con dirección web no se accede a ningún servidor. Es de destacar que esta ley de acceso electrónico del ciudadano dejará de estar en vigor este próximo 2 de octubre, pero aún así sin página accesible por Internet es imposible cumplir el precepto número uno de la legislación de transparencia: disponer de un portal destinado a mostrar estos datos de la forma más sencilla posible al ciudadano.
San Andrés, el más grande sin transparencia
Entre los 49 municipios que no cumplen ya ni con el precepto básico de tener un Portal de Transparencia fácilmente accesible a los ciudadanos y con información actualizada está el tercer municipio de la provincia, San Andrés del Rabanedo.
El exalcalde de San Andrés, Gregorio Chamorro (PP), y la actual alcaldesa de San Andrés, María Eugenia Gancedo (PSOE). Fotos: Ical
No hay nada, ni una mención a la transparencia en una web municipal avejentada, mal estructurada y prácticamente sin utilidad para el ciudadano. Un municipio de más de treinta mil habitantes en los que sólo se destaca la posibilidad de pagar telemáticamente los impuestos, pero nada sobre los contratos que se hacen o la posibilidad de accceder a documentación pública por parte de sus ciudadanos.
San Andrés del Rabanedo ha tenido, como todos los ayuntamientos, dos años para cumplir los preceptos de la Ley de Transparencia nacional y tendrían que estar cumpliéndola desde diciembre de 2013. Sin embargo, tanto el anterior alcalde, Gregorio Chamorro (del PP), como la actual, Maria Eugenia Gancedo (del PSOE), lo único que se han limitado es a anunciar que se llevaría adelante el proyecto de Portal de Transparencia. La última vez en julio de 2015, cuando el concejal de Hacienda afirmó que se licitaría definitivamente un proyecto de Portal de Transparencia. Catorce meses después esa zona en la web no existe o es imposible acceder a ella.
Lo más grave del asunto es que el tercer municipio más grande de la provincia de León tampoco tiene datos accesibles en el Portal de Transparencia del Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas, la opción que se desarrolló junto a la Federación Española de Municipios y Provincias para los ayuntamientos que no tuvieran este tipo de portales. Y muestra de cuál es la falta de transparencia endémica de esta administración local, es que en septiembre del año pasado el PP criticó al Equipo de Gobierno formado por PSOE y PAL que no entrara en él. Es muy chocante que quien no hizo el esfuerzo desde que se aprobó la ley nacional en diciembre de 2015 hasta que dejó el gobierno municipal 16 meses después, sí lo exija a sus sucesores a los tres meses de regresar a la oposición.
En San Andrés del Rabanedo el acceso a la información municipal es uno de los más difíciles de la provincia, como indican las múltiples quejas de los grupos de la oposición al respecto durante años y años. Si la opacidad de la información municipal es hasta denunciada por los propios concejales no es de extrañar que los vecinos tampoco tengan acceso a ella por muchas promesas que se hayan hecho.
León y Ponferrada cumplen de manera deficiente la Ley de Transparencia aunque lo intentan. En San Andrés y Villaquilambre, tercer y cuarto municipio de la provincia, la falta de cumplimiento es prácticamente total
El contradictorio caso de Villaquilambre
El Ayuntamiento de Villaquilambre es otro caso de la falta de Portal de Transparencia en municipios grandes (en este caso el cuarto de la provincia). Aunque destaca una contradicción bastante extraña, ya que la intención de este Ayuntamiento ha sido desde siempre que su página web tuviera información cercana y completa al ciudadano. Incluso dispone de un Portal de la Ciudadanía desde enero de 2012, y fue uno de los primeros ejemplos a seguir en Internet de toda la provincia en comunicación electrónica con sus vecinos.
Pero los requerimientos de la legislación de Buen Gobierno son distintos. En ella se indica que las administraciones públicas han de ofrecer de forma visible un Portal de Transparencia en la portada de su web para que los ciudadanos puedan comprobar, entre otras cosas, en qué se gasta el dinero. Es decir, debe haber listados de contratos mayores (obras o grandes suministros) y menores (por ejemplo en qué medios de comunicación se gastan la publicidad y cuánto dinero se invierte en cada uno de ellos, o cuánto papel se gasta en las oficinas, o lo que cuesta reparar las farolas o los bancos de los parques) y acceso a sus expedientes entre otras muchas cosas. El esfuerzo de Villaquilambre en comunicarse lo mejor posible con sus ciudadanos no sirve para cumplir la Ley de Transparencia y ahora mismo es un ayuntamiento que la contraviene desde el primer punto.
Pero no sólo San Andrés y Villaquilambre son municipios de importancia que no tienen portal de Transparencia. Entre los otros 50 se pueden encontrar los nombres de Camponaraya, Cistierna, Hospital de Órbigo, Molinaseca, Páramo del Sil, Puente de Domingo Flórez, Toral de los Vados o Torre del Bierzo. Todos ellos 'pasan' de conectar siquiera a su web al menos un espacio vacío como al que enlazan los que usan la plantilla del SAM.
Y es que para la gran mayoría de los alcaldes de la provincia de León lo que sí parece importante y fundamental es que los ciudadanos de sus municipios puedan realizar por sí mismos las gestiones municipales o que paguen voluntariamente de forma telemática sus impuestos, como ocurre en casi todas las webs de estas entidades locales. Pero lo que parece no importarles lo más mínimo es mostrar a sus convecinos cómo se gasta el dinero en su Ayuntamiento, ni cumplir unas de las legislaciones más importantes en cualquier país democrático para evitar la corrupción.
Sin transparencia no hay verdadera democracia y, además, se incumple la ley a sabiendas; lo cual podría llevar a que cualquier ciudadano considerara denunciar a su alcalde por un delito de prevaricación con consecuencias penales.