Mejora la situación de incendios en la provincia de León, donde solo se mantiene en nivel 2 de peligrosidad, el máximo, el incendio de Fasgar-Colinas del Campo donde, aunque la noche ha permitido acotar el avance, todavía preocupa su reactivación y la cercanía a poblaciones. Durante la noche, el fuego técnico empleado en la zona parece haber tenido los efectos deseados y ha dejado de avanzar hasta el valle del río Omaña.
Bajan a nivel 1 de peligrosidad los de La Baña, Llamas de la Cabrera, Barniedo, Anllares, Garaño y Berlanga del Bierzo, otro de los más graves que se desató ayer, jueves, y que se elevó en ese mismo día a nivel 2. Más de 200 vecinos tuvieron que ser desalojados, aunque ya han regresado a sus casas. El incendio está controlado pero vigilado, tras la detención de un joven de 20 años acusado de haberlo provocado de manera intencionada.
El incendio de Porto, que pasó de Zamora a León por la zona de La Baña, evoluciona de manera positiva pese a las reactivaciones. El trabajo nocturno se ha centrado en la contención y la vigilancia, con un nuevo repunte esta mañana en la zona de la Barrosa.
Además, en León se declararon este jueves otros dos incendios en La Robla y San Andrés del Rabanedo, ambos ya controlados.
Se mantienen en nivel 1 los fuegos de Anllares del Sil, Llamas de Cabrera y Barniedo de la Reina, estabilizados aunque con algunas reactivaciones por el viento.
En la provincia ya no quedan localidades desalojadas y se levanta el confinamiento de Fasgar, Vepugin, Posada de Omaña, Torrecillo y Barrio de la Puente.
En cuanto a las carreteras, permanece cortada la LE-5330, entre Igüeña y Colinas del Campo de Martín Moro.
La crisis de incendios en León comenzó el 8 de agosto y, tras más de veinte días, siguen activos los de Fasgar, Anllares del Sil y Llamas de Cabrera. A pesar de la mejoría de esta situación la provincia de León todavía se encuentra en riesgo extremo de incendios forestales durante este viernes, por lo que se debe extremar la precaución.