La Diputación de León ha iniciado el proceso para intentar completar su plantilla de bomberos que conforman el Servicio de Prevención, Extinción de Incendios y Salvamento de la provincia (Sepeis), aquejado de una importante crisis laboral en estos momentos y apenas un año después de la puesta en marcha del servicio tras dos décadas de espera.
En estos momentos, tal y como contó ILEÓN, el servicio hace aguas por problemas de operatividad, de organización, de falta de plantilla suficiente, de retribuciones, de renuncias casi masivas, de sobrecarga y de malestar. Actualmente hay en funcionamiento cuatro parques de bomberos: Valencia de Don Juan en el sur; Villablino en la comarca de Laciana, Montaña Occidental; Cistierna, para la Montaña Oriental; y Astorga, pero con tales deficiencias que alguno ha tenido que cerrar algún día por la escasez de efectivos.
Uno de los problemas es la falta de plantilla tras la 'espantada' de buena parte de quienes aprobaron la oposición en su día pero han optado por irse a otros destinos donde tenían plaza, entre ellos el jefe del servicio. Y esta es una de las plazas que la Diputación de León sacará a concurso para completar, aunque mediante sistema de libre designación, según el anuncio publicado al finales del mes de marzo. Esto es, tendrá que ser otro funcionario de otro servicio de bomberos quien ocupe la plaza, cuyo plazo de candidaturas todavía no está abierto.
La Diputación de León también ha optado por un concurso restringido, es decir bajo la fórmula de traslado de otro funcionario, para las plazas de oficial técnico y suboficial técnico del Sepeis, tal y como recoge el Boletín Oficial de Estado en su edición de este martes 9 de abril. En ambos casos se abre un proceso de quince días hábiles para aquellos que quieran y que ya tengan la condición de funcionario de algún servicio de extinción de incendios o, también vale, en servicios de emergencias o análogos. El concurso específico de méritos será valorado por un tribunal
La plantilla actual del Sepeis está formada por 40 bomberos que accedieron como personal funcionario por oposición, 13 cabos y dos oficiales, estos últimos puestos que ahora se cubrirán mediante los concursos convocados. Pero de los bomberos rasos se han quedado en 30 plazas por renuncias a los puestos, agotando además la bolsa de trabajo de aquellas oposiciones por lo que la institución convocará otras 20 plazas para solventar la situación.
La acumulación de jornadas ha provocado un conflicto de la plantilla con la Diputación, a la que exigen que pague adecuadamente los excesos que debe asumir la actual plantilla hasta que se resuelva la situación y se logre un número de bomberos adecuados para la prestación del servicio. La institución asegura que está dispuesta a un acuerdo razonable mientras estabiliza la plantilla, con un horizonte de poner en marcha en dos años los parques secundarios prometidos en La Pola de Gordón, Bembibre, Villafranca del Bierzo, Sahagún y La Bañeza.