La Audiencia Provincial de Huesca suspendió de manera definitiva la condena de dos años de prisión impuesta en noviembre de 2016 por el Juzgado de lo Penal número 1 de la ciudad aragonesa al empresario minero Victorino Alonso por la destrucción de la cueva de Chaves, considerado como uno de los yacimientos neolíticos más importante de la península ibérica. Alonso, que también debía hacer frente al pago de una multa de 25,5 millones de euros, no pisará la cárcel ni deberá hacer frente al pago de la indemnización, ya que el tribunal lo considera insolvente.
Pese a los recursos planteados por la Fiscalía, los abogados del Gobierno de Aragón y la asociación Acción Pública para la Defensa del Patrimonio Aragonés (Apudepa), la resolución considera a Alonso “un delincuente primario” sin antecedentes penales en el momento de la comisión del delito. Por ello, tras la reducción de la pena de cárcel original, establecida en dos años y medio y rebajada seis meses debido a “dilaciones indebidas” en el proceso, el empresario leonés se librará de pisar la cárcel pese a ser considerado autor de un delito contra el patrimonio histórico, siempre que no delinca en los tres años posteriores.
Los hechos se remontan a 2007, cuando Ecologistas en Acción denunció la destrucción del yacimiento, en el que Alonso habría instalado comederos y abrevaderos para la cría de cabras, sin la comunicación ni autorización de la Dirección General de Patrimonio Cultural.