Todos los años por estas fechas –Semana Santa o unas semanas después– no me resisto a volver a disfrutar reponiendo tres hitos de la gran pantalla: La Vida de Brian, Ben-Hur y la saga de Star Wars. Me refiero en concreto a los capítulos IV, V ,VI y III, tal y como nos las ordenó George Lucas, Disney se podría haber ahorrado las posteriores secuelas, que no merecen el mínimo comentario.
Les cuento esto porque me permite por un lado dar entrada a este artículo de opinión y por otro lado entroncar con el artículo en cuestión.
Y es que mientras disfruto de este pequeño placer, otros también a modo de ritual prefieren celebrar sus propias penitencias, crucificar a paganos y sacar toda su panoplia para deslegitimar gobiernos democráticos salidos de las urnas y refrendados por el congreso de los diputados (donde están los representantes del pueblo español).
Es ya tradición es nuestro singular país montar la marimorena cada vez que el resultado democrático no cumple las expectativas de unos –como si las expectativas de los demás, fueran menos importantes y honestas–. Por lo que tampoco voy a darle más recorrido, porque resulta agotador y ofensivo.
Curiosamente nuestra Constitución Española en su artículo 1 comienza: “España se constituye en un Estado social y democrático de Derecho, que propugna como valores superiores de su ordenamiento jurídico la libertad, la justicia, la igualdad y el pluralismo político”. De dicho artículo fundamental me voy a centrar en la primera oración, es decir; España se constituye en un Estado Social y Democrático de Derecho. ¡Qué pereza supone tener que explicar que es un Estado Social y Democrático de Derecho!
Básicamente es social porque así somos los seres humanos que convivimos diariamente en un espacio común, compartimos unas reglas llamadas leyes y normas, y donde se procura que todo se pueda dirimir sujeto a la ley –y si fuera también a la razón, tanto mejor–.
En el episodio V de Star Wars en un momento de su adiestramiento para llegar a ser un caballero Jedi, el maestro Joda le dice a Luke Skywalker: “Más rápido, más fácil y más seductor… es el reverso tenebroso”. Curiosamente, en estos días en que reaparecen la irracionalidad, las figuras autoritarias, las teorías conspiranoicas y las guerras sangrientas, se echan de menos propuestas y figuras que inviten a un entendimiento común. Es difícil concretar un mínimo de entendimiento cuando el atractivo y la persuasión del insulto, la sátira y el radicalismo, resulta demasiado fácil, confortante y aplaudido por los fans. Lo contrario sería el debate, el respeto y el compromiso profesional de cada uno de los actores de lo que llamamos estado del derecho y democrático.
En esta sociedad uniforme en todas sus vertientes, fragmentada en todo lo social donde el espacio público se encuentra reducido a microespacios, el neoliberalismo vive, disfruta y se adueña de todos aquellos que ven al vecino, al compañero o colega como rival o incluso como enemigo. Y no se lo recrimino, el neoliberalismo se ha instaurado en el primer lugar de la escala de valores, y lo que es peor, el neoliberalismo es la agenda política de estos partidos y de sus representantes. Sin base ni fundamento, sin rigor ni razón, pero es más fácil y más seductor. ¡Como no va a ser más seductor votar a quien me prometa barra libre, y cerveza fácil como garante de la libertad! Y en esas estamos todos a tomar cañas, que para libre ya estoy yo.
El gran movimiento social que dio el impulso definitivo para conformación de una sociedad libre y democrática que se consagró en nuestra constitución fue toda aquella masa de estudiantes, familias, grupos de trabajadores y organizaciones sindicales y asociaciones que querían una sociedad plural y dejar atrás cuarenta años de dictadura. A estas alturas de partido todo el avance social, todo el espacio público y todo lo que lleve el adjetivo público no interesa, está denostado, y muchos cargos políticos están haciendo todo lo posible por destruirlo. Luego el resultado ya lo sabemos una mayor desigualdad, falta de equidad social y de justicia social, siendo cada día un poco más norteamericanos.
Otro de los atractivos y por qué no, gran truco de escapismo es el haber erradicado la clase trabajadora atrayéndola al eufemismo de clase social media. Curiosamente, el gran porcentaje de la sociedad es 'clase social media', y todos tan contentos. Cualquier miembro de la clase social media se puede comprar un iPhone última generación –aunque me suponga el salario de un mes– pero soy clase media, que es lo que importa.
Finalmente, Anakin Skywalker dice a su maestro y amigo “o estás conmigo o eres mi enemigo”. El maestro Obi-Wan Kenobi le responde “solo un Sith es tan radical y extremista”.
Por eso ya sabéis: elegid entre libertad o comunismo.