Es tiempo de recapitular, de escoger alguna de las mejores producciones que hemos podido disfrutar en este año 2025 que está a punto de cerrar sus puertas. Como casi siempre, ha habido de todo, mucha producción audiovisual en una dinámica que está consiguiendo trivializar el oficio de contar historias con una cámara, que está consiguiendo que el entretenimiento devore al arte. Aún así, se siguen gestando historias únicas, evasiones de salón que hacen pensar, que nutren esa cierta y maravillosa perplejidad que es tan hermosa cuando es apelada.
Aquí les dejo una subjetiva lista con diez miniseries que cuentan cosas, que entretienen y en algunos casos también educan. Escojan una cualquiera y llenen cualquiera de estas tardes que se avecina con una buena historia. Porque de eso se trata desde el principio de los tiempos: una buena historia y nuestra imaginación.
Anatomía de un instante (España) – Movistar Plus+
La miniserie de Alberto Rodríguez es tan interesante como entretenida. Anatomía de un instante es una de esas series que, además de todos los valores artísticos que atesora, debería ser enseñada a los jóvenes en las clases de historia. Por eso, para qué piensen, para que descubran de dónde venimos, para que entiendan porque es tan necesario conocer nuestra propia historia.
The Studio (Estados Unidos) – Apple TV
Hollywood se mira a sí mismo en esta hilarante comedia que parodia con descaro y mucho sentido del humor la realidad diaria que se vive en una productora, las ansiedades que invaden a ejecutivos y creadores, las dudas y disparates que se suceden hasta encontrar esa serie o película que logre triunfar. Plagada de cameos y referencias que harán las delicias de cinéfilos.
Animal (España) – Netflix
Lo primero es reconocer que al recomendar esta serie que cuenta las andanzas de un veterinario rural gallego que termina trabajando en una tienda de mascotas, no soy nada objetivo. Después de trabajar durante años en la televisión de Galicia conozco personalmente a muchos de los implicados, tanto detrás como delante de la cámara. Y quiero que les vaya bien, algo que ha sucedido porque la serie protagonizada por Luis Zahera ha tenido un gran éxito de público. Es entretenida, sin más ni menos pretensiones que dejarse ver con agrado.
Task (Estados Unidos) – HBO Max
Brad Ingelsby, creador de esa otra maravilla que es Mare of Easttown (2021), vuelve a fijar su mirada en la parte fea del mundo, en los rincones de la derrota, en todos esos tipos perdidos y erráticos que vagan por la vida. Una trama muy potente que engancha desde el primer episodio y un tratamiento de personajes complejo y lleno de aristas.
Blue Lights (Irlanda) – Movistar Plus+
Blue Lights es otro estupendo drama policial británico que cuenta con el infalible sello de calidad de la BBC. Saben construir mejor que nadie este tipo de producciones, con personajes reales, muy bien escritos y mejor interpretados. Te crees lo que ves, el mundo que retrata es cercano y los problemas de sus protagonistas podrían ser los de cualquiera de nosotros. Estamos ante una de esas inequívocas series que simplemente tratan al espectador como a un adulto. Y esto último puede parecer una perogrullada, pero créanme, no lo es.
Tierra de mafiosos (Reino Unido) – Movistar Plus+
Tierra de mafiosos es un juguete armado únicamente para cumplir su innegociable función de entretener y evadir nuestra mente. No se engañen, aquí no se busca la veracidad o se traslada a la pantalla la biografía real de algún reputado gánster. Esto es pura diversión, con personajes extravagantes y exagerados, con una violencia tan excesiva que roza la caricatura, con unas frases de dialogo que solo pueden ser escuchadas dentro de una ficción y con una rocambolesca trama que permite que todo sea posible, con esa libertad que da precisamente el vasto territorio de la invención.
El eternauta (Argentina) - Netflix
El eternauta no deja de ser otra enésima forma de contar un futuro apocalíptico. Lo que la hace mucho más original que otras series del género es su desacomplejada mirada argentina sobre el drama, con esos paisajes arrasados de Buenos Aires que son tan poco habituales en este tipo superproducciones, o con unos personajes más cercanos a la realidad y tamizados por ese cinismo o sentido del humor tan intrínsecamente porteños.
Yakarta (España) – Movistar Plus+
Posiblemente haya sido la mejor serie nacional de este año que cerramos. Es contenida, un tratado sobre la derrota que rebosa de elocuentes silencios, con unas frases de dialogo que lo dicen con toco con poco. Impresionante duelo actoral entre Javier Cámara y la joven Carla Quillas. Carreteras secundarias y familias rotas tejen este conmovedor relato de perdedores.
Bosh: Legado (Estados Unidos) – Amazon Prime
Bosh: Legado es una continuación de la serie original que no se sale del inteligente guión previsto, tiene las mismas hechuras que todas esas películas y series clásicas del género, es sosegada como una melodía de jazz de los años cuarenta, un elogio a la sencillez narrativa y estilística, una genuina rareza que se distancia discreta y elegantemente de tanto ruido catódico.
Adolescencia (Reino Unido) – Netflix
A estas alturas está casi todo dicho sobre este imperdible drama televisivo presentado en cuatro episodios que abordan desde distintos puntos de vista una tragedia inconcebible para cualquier ser humano con un mínimo de empatía social: el asesinato de una adolescente a manos de un compañero de clase. Obra maestra que remueve conciencias, contundente ensayo social sobre la complejidad del estado actual de esta sociedad que viaja tan rápido como un tren a punto de descarrilar.