Refuerzan la búsqueda del menor desaparecido y rastrean el monte
A medida que transcurren las horas, aumenta la preocupación entre los familiares de J.M. el menor de 14 años desparecido desde el domingo por la tarde de casa de su abuela en Armellada, una localidad próxima al Río Órbigo.
Al amplio operativo montado ayer por la Guardia Civil, esta mañana se han unido especialistas en rastreo del Servicio Cinológico (SYR) y el Grupo Especial de Actividades subacuáticas (GEAS) también de la Guardia Civil, además de un helicóptero. Además, a la búsqueda se han sumado un total de 25 voluntarios de la zona y numerosos familiares.
La Guardia Civil, en declaraciones a ileon.com, ha señalado que se trata de “una tarea complicada” puesto que ya han rastreado una zona de tres kilómetros de río (desde Turcia hasta Santa Marina del Rey) sin novedad. En estos momentos se encuentran rastrillando la zona de monte cercana al lugar donde apareció la bicicleta del menor, en las proximidades de Turcia.
El menor, vecino de Trobajo del Camino, desapareció del domicilio sobre las seis de la tarde del domingo, luego de una fuerte discusión con su padre, por haberse presentado media hora más tarde de lo previsto. Precisamente, en la compleja trama familiar están las pistas que siguen los investigadores para determinar el paradero del menor.
Según el padre, el niño “conoce bien” la zona del río, aunque no sabe nadar. Sin embargo, la familia de la madre dijo desconocer que el pequeño frecuentara la ribera.
“La familia no nos avisó inmediatamente, sino que esperaron hasta ayer (lunes) para informarnos y comenzar la búsqueda. Son muchas horas y esta zona es muy amplia”, indicaron miembros de la Guardia Civil que participan en el operativo.
Ayer, a la vera del embalse ubicado en las proximidades del puente de Santa Marina del Rey se congregaron numerosos vecinos y allegados a la familia, algunos equipados con largavistas y bastones para colabrorar con el operativo de búsqueda. También Cristina, abuela del menor, quien en todo momento repetía que el río “trae demasiada agua”.
“Estuvo en mi casa, pero ni siquiera quiso quedarse a tomar la merienda y recibir su propina porque dijo que su padre lo regañaría si llegaba más tarde. Luego se fue y no lo vimos más”, comentó la abuela.
La familia, residente en Trobajo del Camino, se había trasladado a la zona para pasar la Semana Santa, ya que tanto el padre como la madre son oriundos de Turcia y Armellada, respectivamente.
