El Gobierno prevé una “reducción significativa” del paro al consolidarse la recuperación económica
El ministro de Economía y Competitividad, Luis de Guindos, sostuvo hoy que la recuperación “va a continuar” y será “sostenible” en el tiempo, a diferencia de lo que ocurrió entre 2010 y 2011 con los “brotes verdes” que se marchitaron al llegar la segunda recesión. Además, aseguró que una vez que se “generalice” la “percepción” sobre el nuevo ciclo económico mejorará “sin duda” la contratación y la “calidad” de los empleos, que se traducirán en una “reducción significativa” del paro.
De Guindos, que participó en un encuentro empresarial organizado por El Norte de Castilla en Valladolid, trasladó a autoridades y responsables económicos de la Comunidad que el crecimiento que la economía española ha mostrado en los últimos cuatro trimestres, un año, se “extenderá” a los siguientes, en la que consideró una “nueva fase de la recuperación”, que admitió todavía es “tenue, moderada y prudente”. No obstante, el ministro destacó que España se encuentra en un “punto de partida” distinto a hace dos años por lo que a su juicio puede “mirar al futuro” con otra “visión”.
“Ya ha pasado lo peor”, dijo el titular de Economía en su intervención. Ello se debe al saneamiento llevado a cabo por el sector empresarial, a la reducción del déficit público, a la mejora de la competitividad, al ajuste inmobiliario y a la reestructuración del sector financiero. Por ello, señaló que una vez que España se encuentra en una “posición distinta” al pasado, que una vez que se extienda dejará mejores cifras en el mercado laboral. “Se va a consolidar sin duda”, apostilló.
Asimismo, de Guindos aseguró: “Donde más optimismo encuentro es fuera de España”. “Nadie pone en duda que somos un país competitivo”, añadió el ministro, quien insistió en que ha detectado “mucha confianza” en la economía en el extranjero, que además indicó ya comienza a generarse en el ámbito doméstico, si bien reconoció que todavía existen “dudas sobre la solidez de la recuperación”.
Además, rechazó que las proyecciones económicas del Gobierno sean excesivamente optimistas, ya que señaló se encuentran por debajo de la media del resto de indicadores institucionales, con un avance para este año del 1,2 por ciento y del 1,8 para 2015.
Al respecto, el titular de Economía remarcó que España encadena ya 12 meses consecutivos de crecimiento económico, algo que “nunca antes” se había producido durante la crisis. Insistió en que este crecimiento se acelerará y que el segundo trimestre del año será igual que el primero. Además, aseguró que los datos de empleo desestacionalizados indican que España creará empleo neto y habrá una “reducción significativa” del paro, aunque reconoció que será “insuficiente” puesto que la tasa de desempleo alcanza el 25 por ciento.
Signos de la recuperación
De Guindos señaló que existen dos elementos que reflejan la recuperación en España. Indicó que se está incrementando el flujo de crédito, sobre todo para pymes y para el consumo de las familias y que se está recuperando la demanda doméstica, lo que unido a las exportaciones abren una “nueva fase” de la recuperación. Destacó que existe ahora una cierta “tranquilidad” en el contexto internacional, al mejorar la situación en Estados Unidos, Japón y los países emergentes. También subrayó las últimas medidas adoptadas por el BCE (Banco Central Europeo) para mejorar las condiciones de financiación y evitar la fragmentación de los mercados.
Igualmente, recalcó que ha sido clave contener el déficit público, que este año se situará en el 5,5 por ciento y el próximo en el 4,2, mientras al principio del mandato alcanzaba el nueve por ciento. También defendió la reforma laboral que ha mejorado la competitividad del país y que a su juicio traerá la mejoría en el empleo y la reforma financiera que permitirá al sector afrontar los test de estrés y la nueva revisión de la calidad de sus activos que realizará el BCE en los próximos meses.
Programa de medidas
El ministro aprovechó su discurso y las preguntas de los asistentes al encuentro para adelantar algunos detalles de las próximas medidas del Gobierno. Explicó que se mantendrá la política de consolidación presupuestaria y que se presentará antes de que acabe el mes la reforma fiscal, que costará en términos netos 1.500 millones en 2014 y otros tantos en 2015. Aseguró que está convencido de que los impuestos bajarán y que se pagará menos tributos el próximo año, tanto en el IRPF como en el de Sociedades.
También aclaró que el plan que aprobó el Gobierno con 6.300 millones no está basado en el “gasto público”, sino en mejorar la financiación a través del ICO (Instituto de Crédito Oficial), en facilitar la liberalización de actividades como el turismo y el comercio y en eliminar trabas a la actividad económica. Además, recordó que incluye una nueva edición del Plan PIVE que pretende estimular las ventas de vehículos.
En materia de empleo, avanzó que el Gobierno presentará en próximas semanas un programa de políticas activas para, sobre todo, mejorar la empleabilidad de los desempleados de larga duración, que representan dos tercios del total. También se refirió a la política energética, que recordó pretende reducir el “brutal” déficit de tarifa que se generó con la “burbuja” de las renovables. Señaló que el Gobierno garantiza una rentabilidad “suficiente” del 7,5 por ciento y que con la reforma se ha evitado una subida de los precios de entre el 20 y el 40 por ciento.
Finalmente, sobre el sector financiero aseguró: “Yo no veo fusiones importantes”. Explicó que se ha producido un proceso “muy intenso” de consolidación al pasar de 40 a una quincena de entidades. También, aseguró que las cooperativas de crédito y las cajas rurales se pondrá mantener en el sector si refuerzan su capital y su solvencia.
Además, destacó que el Ejecutivo se ha adelantado diez años en la devolución del préstamo para el saneamiento financiero, con la entrega de 1.300 millones, de los 41.000 que prestó Europa a España, y que ha conseguido vender un 7,5 por ciento de Bankia y Caixa Galicia.