La cultura a pie de calle se moviliza para homenajear a Jalisko tras un año de su muerte
Al cumplirse un año del fallecimiento de Javier del Otero, Jalisko, muchas personas están manifestando la necesidad de realizar un merecido homenaje a su persona y para ello se ha creado un grupo de trabajo con el fin de llevar a buen puerto este clamor.
Inicialmente se planteó celebrar este homenaje durante este verano de 2020 pero dada la situación sanitaria provocada por la Covid-19 los organizadores han pospuesto todos los actos públicos para el verano que viene. Para poder hacer realidad los actos en recuerdo a Jalisko, el grupo de amigos que los están organizando cuentan con el apoyo y compromiso del Ayuntamiento de Astorga.
Libro digital
Los primeros pasos de este homenaje se inician el día 1 de septiembre con la apertura de participación en un libro digital gratuito de Homenaje Público que se presentará a partir del 23 de diciembre de 2020 y en el que puede colaborar quien lo desee aportando textos (cartas, poemas, reflexiones...), imágenes (fotografías, dibujos, o cualquier otra expresión plástica). Cada colaboración no podrá sobrepasar el espacio de un folio Din A-4.
Quienes participen con un vídeo o una canción deberán alojarla en alguna plataforma como YouTube o similares y enviar el enlace acompañado de una imagen, un texto breve o ambos.
La coordinación del libro digital se realizará desde Marciano Sonoro Ediciones, la editorial en la que Javier del Otero publicó su libro Astorga Rock. Las colaboraciones se enviarán al correo editorial@marcianosonoro.com y está abierta la participación hasta el viernes 11 de diciembre de 2020.
El enlace de acceso al libro digital se enviará a todos los participantes el 23 de diciembre y se hará público en redes y medios digitales. Previamente se realizará una única copia del mismo en papel que se entregará a su mujer Silvia y a sus hijos.
Además del libro, sus amigos organizarán en el verano de 2021 una amplia exposición donde se recogerá parte de su obra fotográfica y sus escritos. También en verano, las fechas exactas no están aún decididas, se celebrará un concierto homenaje en el que los músicos astorganos y de fuera de la ciudad vinculados a Javier del Otero le darán su merecido tributo musical.
El sueño de Jalisko
La guinda será la creación de un evento de carácter permanente que cuenta con el apoyo institucional, “y que fue para Javi un sueño que compartió con muchos de nosotros” -aseguran sus amigos-: la creación de un concurso de ámbito nacional de bandas emergentes de rock que se denominará 'Concurso de bandas emergentes Jalisko Rock. Ciudad de Astorga'. “Queremos que nuestra ciudad se convierta en un referente para las bandas jóvenes de rock y que este concurso-festival esté cargado de la vitalidad, la energía y el buen rollo que Jalisko siempre transmitió a su alrededor”, señalan los organizadores.
Todas las personas que quieran participar de una manera u otra en este amplio proyecto pueden ponerse en contacto con el equipo de trabajo a través del mail jaliscorockastorga@gmail.com. “Necesitaremos amigos para la organización de los conciertos, para el montaje de la exposición, para realizar trabajos de diseño, una página web y para todas las iniciativas que vayan surgiendo. Tu colaboración y participación será de gran ayuda”, indican sus amigos.
Un agitador cultural
Para quien no conociera a Javier del Otero, sus amigos destacan de él que fue una persona de gran transcendencia para la cultura popular de Astorga. Su capacidad organizativa y su absoluta entrega a las causas mas dispares popularizaron su actitud vital como agitador cultural. En la memoria de todos están sus exitosos festivales navideños de rock realizados a beneficio de diferentes asociaciones, los festivales de verano, que persiguiendo el mismo loable objetivo, visibilizaban el trabajo de numerosos artistas, astorganos y de fuera, o el apasionado esfuerzo que realizó para hacer realidad el libro Astorga Rock.
Organizaciones como la Asociación de Enfermos de Parkinson, la Asociación de Familiares de Enfermos de Alzeimer o Alfaem, por poner tres ejemplos, estuvieron en su objetivo cívico como ciudadano. Jalisko, el desenfadado y desaliñado astorgano, quijote de mil causas, ojos pícaros y sonrisa permanente, es hoy merecedor del recuerdo imperecedero de su ciudad. Hoy toca comprometernos con la memoria de Jalisko, aquel que tantas veces tomó por bandera la cultura popular de su querida Astorga.
