Un documental de lobos y pastores en León para reconciliar con la realidad de esta especie

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Título: “Barbacana, la huella del lobo”. Director: el biólogo y documentalista de naturaleza Arturo Menor. Protagonistas: los lobos leoneses. Son sin duda las estrellas animales indiscutibles de este trabajo que verá la luz con su estreno el próximo 5 de octubre, aunque protagonismo compartido con los pastores leoneses y sus mastines guardianes con los que Menor convivió durante meses.

El resultado de grabaciones de tres años es este documental, el segundo impulsado por Artuno Menor (el primero fue “Wild med: El último bosque mediterráneo”), y cuya experiencia directa le permite defender una imagen muy distinta a la que del lobo se tiene de manera ancestral, como causante de graves daños y ataques, y se alimenta aún con políticas como la caza de esta especie, que mantiene la Junta de Castilla y León a pesar de dos sentencias ya del Tribunal Supremo, con una argucia administrativa. Sólo en 2017 se autorizó en la provincia poder abatir 57 ejemplares.

Mayor habla de una especie “emblemática y mitológica” mientras tiene claro que “no hay un conflicto real entre el lobo y la ganadería extensiva sino más bien ganaderos y lobos conflictivos”. Porque sobre los primeros, llega a mantener que «hay ganaderos conflictivos que echan la culpa al lobo para cobrar indemnizaciones, y hay lobos conflictivos que atacan el ganado, pero no hay un conflicto real“.

Y es que el director habla de animales “astutos pero a la vez muy desconfiados”, explica el director. Tres años tardó Menor en el rodaje de la cinta, con la que quiere demostrar que “no hay realmente un conflicto entre el lobo y la ganadería extensiva sino más bien ganaderos y lobos conflictivos”.

Después de su primer proyecto, Menor tenía la necesidad de seguir con “un trabajo conservacionista”, en el que además de recoger la realidad de la convivencia hombre-animal, reflejara las soluciones de los propios ganaderos. Para ello, visitó varias zonas de Sierra Morena, Guadalajara, Zamora, Palencia y León, y asegura que los propios ganaderos le explicaron que “no tenían conflicto con el lobo porque a través de medidas preventivas para evitar ataques, el problema se corregía”. Esto le llamó mucho la atención y le inspiró para contarlo, ya que entre las medidas preventivas que utilizaban estaba una tan “simple como la barbacana” que da título a su trabajo.

La barbacana, la defensa más efectiva

La barbacana es una primera línea de defensa utilizaba en la edad media. Los ganaderos llaman así a una cuerda perimetral que colocan alrededor del redil, donde confinan al ganado por la noche. “Como el lobo es un animal muy astuto y a la vez muy desconfiado, no se atreve a pasar ni por debajo ni por encima de la barbacana”, detalla, y añade que los ejemplares se dedican entonces a dar vueltas alrededor del ganado, y si hay pastores o perros mastines para defenderlo “se evitan cualquier ataque”. Así se pone de manifiesto “lo sencillo que es poner en marcha un sistema como este y la voluntad del ganadero para defender su ganado”.

El “amor por la naturaleza” de los pastores leoneses

Además, el documental plantea que “el lobo es un medio para controlar la tuberculosis”, porque elimina a los ejemplares de ciervo o jabalí que afectados por el mal tienen dificultad para correr, y así evitan que por medio de las mucosas, las heces o el sudor contagien al ganado.

Su experiencia ha sido “muy motivadora y a la vez muy enriquecedora” por el contacto con los pastores de León, de quienes afirma que aprendió “su amor por la naturaleza y la admiración por el lobo, porque entienden su inteligencia para robarles de vez en cuando una oveja”.

A pesar de que aún faltan semanas para que 'Barbacana, la huella del lobo' comience a exhibirse y distribuirse, ya tiene en mente un proyecto sobre la migración de aves en Europa (algunas imágenes ya aparecen en este trabajo), una ambición más compleja y costosa y para la que aún no tiene productor, por lo que espera que el documental del lobo ibérico sea “todo un éxito” y le facilite la financiación necesaria.

En este proyecto ha contado con Álvaro de Armiñán, como ayudante de dirección, quien junto a Menor y Luis Manuel Carmona se han encargado del guión. Jesús Olmedo se ha encargado de la narración y Javier Arnaz de la música, en la que ha contado con la participación de la conocida cantante Rozalén.

Aquí os dejamos el VÍDEO de avance del documental:

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