La Diputación licita el arreglo de siete carreteras de León por 9,1 millones de euros
La Diputación de León anuncia este sábado que está a punto de sacar a licitación obras en siete tramos de otras tantas carreteras de la provincia por importe de 9,13 millones de euros, para llevar a cabo el ensanche y mejora de más de una veintena de kilómetros de la red provincial.
El primer lote se corresponde con la carretera LE-7603 que une Valencia de Don Juan y Castilfalé, en concreto el tramo entre esta última localidad y Villabraz, con un presupuesto base de licitación de 1.474.000 euros. El segundo, la cuarta fase del proyecto contemplado en la carretera LE-6605, de Palanquinos a Cubillas de los Oteros por Corbillos, con 697.300 euros.
El tercer lote, valorado en 955.000 euros, se refiere a la vía LE-6514, de Fontecha a Villamañán en el tramo de San Esteban a Villacé. El cuarto se corresponde con la LE-5602 de Valdelafuente a Villaturiel, entre esta localidad y Valdesogo de Abajo, por 880.790 euros. El quinto lote, el de mayor importe, con 2,79 millones de euros, contempla la actuación en un tramo de 6,25 kilómetros de la LE-5418, que une la LE-420 y San Feliz de las Lavanderas por Riofrío y Ferreras.
Por importe de 1,54 millones de euros se licitará el tramo entre Filiel y Boisán de la LE-6425. Y el séptimo y último lote, que está valorado en 787.380 euros, se corresponde con obras de ensanche y mejora en la LE-7401 de Palacios de la Valduerna a Tabuyo del Monte, en el tramo entre Destriana y el punto kilométrico 15,240.
Carretera de Aguasmestas a Fasgar
Por otra parte, esta semana se recibieron las obras consistentes en la construcción de un muro de sostenimiento de escollera en tres puntos de la carretera LE-4402, de Aguasmestas (Riello) a Fasgar (Murias de Paredes), que requirieron de una inversión de 316.817 euros.
La actuación se acometió por vía de urgencia para resolver la inestabilidad del talud de la margen izquierda, que había producido el derrumbe de la berma y parte del carril en ciertos puntos. Los trabajos consistieron en la ejecución de una escollera con material filtrante y la reposición del firme de la carretera. Además, se construyó un drenaje bajo la cuneta actual, revestida con hormigón, a fin de conducir las aguas filtradas por la ladera de la margen derecha. Del mismo modo, se instaló una barrera de seguridad y se repuso la señalización en el tramo afectado.
