Una inversión de 10,8 millones de euros permitirá modernizar el regadío en 878 hectáreas de León

El consejero de Agricultura firma un convenio en materia de regadío con varias comunidades de regantes de León. / Campillo / ICAL

Miriam Badiola / ICAL

El consejero de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, Jesús Julio Carnero, firmó este viernes un convenio con los presidentes de la Comunidad de Regantes de Llamas de la Ribera y Presa, José Demetrio Fernández, el de la Comunidad de Regantes Presa Forera, Canillas y Llacín, Luis Fuente, y el de la Comunidad de Regantes Canal de Carrizo, José Antonio Amor, para la modernización del regadío de 878 hectáreas en esta parte de la provincia de León, lo que beneficiará a 865 agricultores. Para ello, se invertirán un total de 10,8 millones de euros, de los que la Junta de Castilla y León aportará 7,7, mientras que los 3,1 restantes correrán a cargo de las Comunidades de Regantes. El plazo de ejecución estimado de las obras es de 24 meses.

Así lo señaló este viernes el consejero de Agricultura durante su visita a Llamas de la Ribera, donde puso de relieve la “importancia de la modernización de regadíos” con “claros y evidentes beneficios ambientales, económicos y sociales”, ya que permite “un ahorro de agua del 20 por ciento” y un incremento en el valor agregado bruto del 30 por ciento. Sin embargo, “el beneficio más importante” para Carnero es que “donde hay regadío y está modernizado hay más población y más jóvenes incorporados a la agricultura”, algo que calificó de “determinante” para el Gobierno autonómico.

Por este motivo, Jesús Julio Carnero recordó que el compromiso inicial de la Junta de Castilla y León era transformar el regadío en 30.000 hectáreas de la Comunidad Autónoma, de manera que a fecha de hoy ya están ejecutadas o en fase de ejecución el 97,4 por ciento, lo que supone más de 29.000 hectáreas. Por ello, avanzó que, con el presupuesto autonómico de 2022 que “previsiblemente se aprobará este mes de diciembre”, el propósito es llegar a la modernización de 34.000 hectáreas, es decir, “superar con reces el compromiso inicial en aras a tener una agricultura más moderna y que fije población”.

Como “antesala” de la modernización de regadío en las Comunidades de Regantes con las que se firmó hoy el convenio, el titular de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural recordó que se ha llevado a cabo una concentración parcelaria que requirió de una inversión de unos 4,7 millones de euros.

Regulación del agua

El consejero de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, Jesús Julio Carnero, aprovechó su presencia en Llamas de la Ribera para pedir a la Confederación Hidrográfica del Duero “mayor celeridad” para ejecutar las obras adicionales para mejorar la capacidad de regulación del agua, que “permitiría pasar del 30 al 50 por ciento”.

Carnero resaltó que en la zona se trabaja con cultivos como el lúpulo, “de especial importancia porque Castilla y León es la comunidad líder en este cultivo en España”. En este espacio, ubicado en el Órbigo, consideró “especialmente importante” modernizar los regadíos, ya que “la capacidad de regulación es limitada para atender las demandas”, por lo que recobra “interés” que la CHD ejecute las obras para mejorarla y así poder recuperar el retraso acumulado en zonas como el Órbigo y Carrión.

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